Puerto Príncipe, 1 feb (EFE).– Al menos 560 personas han muerto de cólera en Haití desde que la enfermedad reapareció en el país en octubre de 2022, según el boletín emitido este miércoles por el Ministerio de Salud Pública, que sitúa la tasa de positividad en cerca del 37 %.
De los fallecidos por la enfermedad, 365 murieron en hospitales y 195 en comunidades sin posibilidad de llegar a un centro sanitario, en parte a causa del contexto de aguda crisis humanitaria agravada por una situación de inseguridad sin precedentes causada por la acción de bandas armadas.
En total, las autoridades sanitarias haitianas han contabilizado 27.434 casos sospechosos de cólera, de los que se han confirmado 2.057, de ellos 19 nuevos, y han sido hospitalizados 23.540 pacientes.
El departamento geográfico más afectado por el cólera sigue siendo el Oeste, con 1.203 casos confirmados y 16.912 sospechosos, con Puerto Príncipe, Carrefour y Cite-Soleil como las ciudades más afectadas por el brote.
La edad media de los casos hospitalizados es de 19 años y los niños de 1 a 4 años conforman el grupo más afectado, con 405 contagios confirmados de un total de 5.495 sospechosos, mientras que, por sexo, el 56,44 % corresponde a hombres. EFE
También se ha reportado que el colera ha causado la muerte de 457 personas en Haití en 3 meses, según un nuevo balance hecho público este sábado por el Ministerio de Salud Pública y Población (MSPP), que da cuenta de 1.570 contagios confirmados en el país, de un total de 22.575 sospechosos.
De acuerdo con los datos, 18.360 personas están hospitalizadas con síntomas de cólera, que desde su reaparición está causando la muerte de al menos cinco personas al día.
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La edad media de los hospitalizados es de 20 años, y el grupo más afectado es el de 1 a 4 años, con 4.210 casos sospechosos y 305 confirmados.
El departamento geográfico más afectado es el Oeste, con 1.091 casos confirmados, agregó la información oficial.
Estas estadísticas revelan la rápida expansión del cólera en Haití, donde la enfermedad reapareció en octubre pasado en el contexto marcado por una crisis humanitaria dominada por el deterioro del clima de inseguridad.
El cólera causó la muerte de al menos 7.000 personas en esta nación tras la epidemia de la enfermedad que comenzó tras el terremoto de 2010 y cuyo origen estuvo presuntamente en un vertido de residuos fecales a un río por parte de cascos azules que formaban parte de la misión de paz de la ONU que se desplegó en el país.