Santo Domingo, (EFE).- La Oficina Judicial de Servicios de Atención Permanente de Santiago aplazó hasta el próximo viernes la audiencia para conocer medidas de coerción contra dos hombres detenidos en el marco de la operación KAF, un caso de tráfico de armas de fuego y sustancias controladas.
Así lo dispuso el juez Bienvenido Liz a solicitud de los abogados de los imputados Gregory Alberto Diplán Güichardo y Juan Miguel Almonte Padilla (alias Colita), para los que el Ministerio Público pide un año de prisión preventiva.
Los dos hombres enfrentan cargos por comercializar armas de fuego de alto calibre mediante redes del crimen organizado y distribuir drogas narcóticas, según el Ministerio Público.
Supuestamente, ambos pertenecían a una organización a la que las autoridades ocuparon seis fusiles, dos pistolas y 6,796 cápsulas, así como más de cuatro millones de pesos y más de 17,000 dólares.
La Fiscalía sostiene en la solicitud de medidas de coerción que los imputados guardaban armamentos ilegales, dinero en efectivo y que las armas de fuego no poseen documentación para su porte, tenencia o venta.
Las armas, que eran adquiridas en el extranjero y traídas al país a través de la compañía Quisqueya Shipping, estaban destinadas al uso ilegal de organizaciones del narcotráfico, según la acusación.