Abogado de Vidal Plast asegura explosión en San Cristóbal "fue un mero accidente"

En declaraciones al programa "Sol de la Tarde" del grupo RCC Media, el abogado de la empresa Vidal Plast, Norberto Rondón, se pronunció sobre la explosión que sacudió la ciudad de San Cristóbal el pasado 14 de agosto, un trágico evento que ha dejado un saldo de al menos 37 personas fallecidas. En sus palabras, Rondón calificó el incidente como un "mero accidente" que no lo provocó intencionalmente nadie.

El jurista enfatizó que, hasta el momento, las investigaciones y documentos a los que han tenido acceso, como el informe del J2 del Ministerio de Defensa, el informe del Cuerpo de Bomberos de San Cristóbal, entrevistas con personas de la comunidad y sobrevivientes con los que han conversado, apuntan a que se trató de un lamentable accidente.

En nombre de la familia Vidal Sandoval y el suyo propio, Rondón expresó su profundo pesar por el suceso que ha consternado al país y que ha trascendido las fronteras de la República Dominicana.

La presión mediática

Sin embargo, también destacó que la presión mediática, la influencia de las redes sociales y el contexto de una campaña política intensa llevaron al Ministerio Público a tomar la decisión de judicializar el caso de manera apresurada, una medida que, según el abogado, es errónea.

Rondón argumentó que la calificación jurídica de homicidio voluntario y la supuesta violación del artículo 319 del Código Penal no se adecúan al evento, ya que, según explicó, el artículo 319 contempla el homicidio por torpeza, negligencia o inobservancia de los reglamentos como un delito de carácter correccional, con una pena que oscila entre tres meses y dos años. Esta definición, según el abogado, no encaja con lo sucedido.

El abogado subrayó que el homicidio es un acto que solo lo puede cometer una persona física, y no por una entidad legal o moral, como una empresa. En este sentido, planteó preguntas sobre la medida de coerción solicitada de un año de prisión preventiva y cómo se manejaría la situación si, en un improbable escenario, el dueño de la empresa, Edward Vidal, fuera condenado a tres meses de prisión.