Al menos 20 pandilleros haitianos han muerto en enfrentamientos con la policía

La comisaría de Saint-Marc confirmó que al menos 20 miembros de la pandilla fallecieron durante los enfrentamientos, mientras que otros resultaron heridos o escaparon.

La Policía Nacional de Haití (PNH), respaldada por la Misión Multinacional de Apoyo a la Seguridad (MMAS), ultimó a decenas de miembros de la pandilla Gran Grif de Savien durante operativos el pasado fin de semana en la localidad de Palmiste, considerada un bastión de la banda criminal.

Los enfrentamientos, liderados por unidades especializadas como la Brigada de Intervención Motorizada (BIM), la Unidad Departamental de Aplicación de la Ley (UDMO), la Unidad Temporal Antipandillas (UTAG) y el grupo SWAT, se extendieron durante dos días y resultaron en la huida de los principales aliados de la banda.

«Los gánsteres de Jonas no pudieron resistir los embates y huyeron», informó la Coordinación de Prensa de la PNH a Le Nouvelliste. Además, destacaron el «compromiso ejemplar y la combatividad» de los agentes kenianos que forman parte de la MMAS.

Un vídeo viral muestra la incursión policial en un enclave clave de la pandilla, ubicado frente a Savien. Según el comisionado gubernamental de la jurisdicción, Venson François, las operaciones continuarán hasta erradicar a las principales pandillas del departamento de Artibonite.

La comisaría de Saint-Marc confirmó que al menos 20 miembros de la pandilla fallecieron durante los enfrentamientos, mientras que otros resultaron heridos o escaparon. Palmiste, conocido como un centro de secuestros, ha comenzado a ser retomado por los residentes locales, quienes celebran los avances logrados por las fuerzas policiales.

Louisseul François, dirigente campesino, aseguró que «si la policía sigue por este camino, ofrecerá a la población de Artibonite su mejor regalo de Navidad». Mientras tanto, Horace Bertude, líder de la Federación de Campesinos y Empresarios Agrícolas del Valle de Artibonite, destacó la importancia del apoyo comunitario y policial para desmantelar el reinado delictivo que ha sembrado terror en la región.