Anne Hathaway reveló que sufrió un aborto espontáneo antes de la llegada de su primer hijo

La ganadora del Oscar Anne Hathaway reveló haber sufrido un aborto espontáneo en 2015 mientras protagonizaba el papel de una mujer embarazada en la obra de teatro Grounded. Durante una entrevista con la revista Vanity Fair, la actriz de 41 años compartió cómo este doloroso evento coincidió con su actuación en esta puesta en escena de seis semanas en Off Broadway, donde debía simular dar a luz en escena cada noche.

“La primera vez (estando embarazada) no me fue bien”, confesó. “Estaba haciendo una obra de teatro y tenía que dar a luz en el escenario cada noche”. Grounded, escrita por George Brant y dirigida por Julie Taymor, presenta a Hathaway como una piloto de drones que se enfrenta inesperadamente al embarazo, abordando los desafíos simultáneos de la maternidad y su cuestionable carrera profesional.

La estrella de Hollywood expresó haber comunicado la noticia de su aborto a sus amigos al visitarla tras bastidores, mientras fingía que todo estaba bien en el escenario.

 

El primer embarazo de Anne Hathaway

Después de dar la bienvenida a su primer hijo, Jonathan, con su esposo, Adam Shulman en marzo de 2016, Hathaway volvió a concebir y dio la bienvenida a su segundo bebé. A propósito de la buena noticia, discutió abiertamente sobre las dificultades de fertilidad en una publicación de Instagram en 2019. “Para todos los que están pasando por el infierno de la infertilidad y la concepción, por favor sepan que no fue una línea recta hacia ninguno de mis embarazos”, escribió en ese entonces.

En conversación con Vanity Fair, la protagonista de El diablo viste a la moda también destacó lo común que son los abortos espontáneos. “Dado el dolor que sentí al intentar quedarme embarazada, me habría parecido poco sincero publicar algo tan feliz cuando sé que la historia tiene muchos más matices que eso para todo el mundo… se trataba más bien de lo que no iba a hacer”, aseguró y enfatizó no sentirse avergonzada por algo que consideraba, estadísticamente, bastante normal.