Santo Domingo.- El vicepresidente ejecutivo del Consejo Unificado de las Empresas Distribuidoras de Electricidad, Andrés Astacio, aseguró este miércoles que con el desfalco al Estado a través de las EDEs por más de RD$ 20,000 millones en la pasada gestión de Gobierno se pudieron construir cinco hospitales como el Luis Eduardo Aybar.
Así se expresó el funcionario al ofrecer detalles para el programa Rumbo de la Mañana, del Grupo RCC Media, sobre la querella penal depositada este martes por el Estado dominicano en contra de 14 personas, entre funcionarios y suplidores del sector, y 25 empresas ligadas a las pasadas administraciones de la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE) y las Empresas Distribuidoras de Electricidad.
Además dijo que esos recursos, sin se llevan a dólares serían unos US$500 millones, servirían para cubrir el 40% de toda la inversión que requiere el sector eléctrico en el país, o bien se pudo utilizar para pagar más de la mitad del déficit que presentaron el año pasado las EDEs, el cual fue de US$800 millones.
Andrés Astacio indicó que las EDEs fueron sometidas a un extenso proceso de auditorías, donde salieron a relucir las irregularidades cometidas y pudieron recopilar evidencias de los ilícitos para poder presentar un expediente acusatorio ante la ante la Procuraduría Especializada de Persecución de la Corrupción Administrativa (Pepca).
El grupo de personas encartadas son: Rubén Jiménez Bichara, Luis Ernesto de León Núñez, Rubén Montás Domínguez, Radhamés del Carmen Maríñez, Julio César Correa, Maxy Gerardo Montilla Sierra, Alexander Montilla Sierra, Juan Alexis Medina Sánchez, Messin Elías Márquez Sarraff, Domingo Antonio Santiago, Julián Esteban Suriel Suazo, Wacal Vernavel Méndez Pineda, Miguel Antonio Reyes Reyes, Peter Alexis Francisco Tejada y Dileisi de Jesús Rivera.
La documentación presentada involucra a 25 empresas nacionales, señaladas como parte del supuesto entramado mafioso.
Para cometer las acciones fraudulentas se distorsionó el mercado de suministros de materiales de las EDEs, de forma tal que prácticamente se constituyó en un monopolio, el cual venía a precios excesivos, en algunos caso con hasta márgenes de un 300%, según explicó Andrés Astacio.
"Por ejemplo, la semana pasada yo presenté los resultados de una nueva negociación que habíamos hechos para la adquisición de un producto específico, que en este caso son los medidores inteligentes, y la diferencia de costo con lo que en el Gobierno anterior se hubiese comprado 177 medidores por unos US$40 millones, a nosotros nos cuesta US$21 millones", añadió el funcionario.
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