La crisis que vive Latinoamérica ha llevado a que en distintos países se abra el debate sobre la reforma a los sistemas de pensiones, concretamente, sobre la posibilidad de que los ahorristas puedan retirar parte de los fondos cotizados.
En Perú, el pasado mayo se aprobó que todos los aportantes al Sistema Privado de Pensiones (SPP) puedan retirar hasta el 25% de sus fondos de las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP).
Los ahorristas pueden pedir un mínimo de 4.300 soles (1.225 dólares) hasta 12.900 soles (3.680 dólares). A principios de julio, más de 3,7 millones de personas se acogieron a esta medida e hicieron las solicitudes de sus fondos.
Polémica en Chile
En Chile, está en discusión en el Parlamento el retiro de hasta 10 % o 4,3 millones de pesos (unos 5.430 dólares) de los fondos de los aportantes en las AFP.
El próximo miércoles 15 de julio habrá una votación al respecto en la Cámara de Diputados del Parlamento. En este espacio, la oposición busca que esta herramienta sea una reforma constitucional.
"Es una medida parcial, puntual, que no enfrenta los temas más de fondo. En el caso chileno, se requiere de un cambio del modelo económico para poder enfrentar la situación creada y la situación que se va a agudizar", dijo a RT el sociólogo Esteban Silva.
Luis Mesina, dirigente de la Coordinadora Nacional de Trabajadores No+AFP, por su parte, dijo que si bien el retiro de fondos no es la demanda que han hecho durante años —en cambio, han abogado por la creación de un nuevo sistema de pensiones—, este es un paso legítimo, "dado el contexto en el que vive el país, la crisis sanitaria y la crisis económica, y dado que tenemos un Gobierno y un régimen político que, permanentemente, desdeña la demanda social".
"Es absolutamente legítimo que las personas puedan disponer de sus ahorros que han generado, con su esfuerzo, para atender lascontingencias", en medio de la crisis económica y sanitaria, enfatizó.
El debate también está abierto en Colombia, donde se evalúa la retirada del 10 % de esos ahorros de pensiones por parte de los cotizantes.
Lo mismo sucede en México, donde hay una iniciativa para el retiro de hasta 13.300 pesos (590 dólares) de las Administradoras de Fondos de Ahorro para el Retiro (AFORE), por parte de personas que han quedado sin empleo en medio de la pandemia.
La medida, que actualmente está en la Cámara de Diputados, contempla que los mexicanos no deberán esperar los 46 días que establece la ley, una vez que queden desempleados, para el retiro de los fondos.