El desborde de la cañada La Bonavides, en el barrio La Ciénaga, en Santo Domingo, por el paso del fenómeno atmosférico del sábado, provocó que más de mil viviendas fueran inundadas por aguas negras, que al mismo tiempo penetran las tuberías del agua “potable” que consumen sus habitantes.
La situación podría empeorar si continúan las lluvias, ya que esta cañada se encuentra taponada y a pesar de los reclamos a las autoridades de la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santo Domingo (CAASD), no han hecho nada para corregir la situación, manifiestan sus moradores.
“Este trabajo que ustedes ven aquí, ese desorden que hizo la pasada tormenta, fue por un trabajo malo que hicieron la administración pasada.
Nosotros se lo dijimos, se lo advertimos que ese trabajo estaba mal hecho, y ellos no nos oyeron y como quiera hicieron el trabajo y mira los resultados.
La cañada explotó por aquí y se inundaron todas esas casas de por ahí abajo y se le dañaron todos los electrodomésticos a toda esa gente: la cama, la nevera, los muebles, … Todo se le dañó a la gente por aquí”, lamentó Ramón Crispín, presidente de la Junta de Vecinos.
Asimismo, los residentes alegan que el problema empeoró luego de que más de cien registros que desembocan en la cañada se taparan.
Las calles inundadas por el desborde del sector fueron:La Bonavides, La Respaldo Clarín, La Respaldo María, entre otras vías adyacentes.
Sus habitantes hacen un llamado a las autoridades competentes para que vengan en su auxilio y les resuelvan la problemática lo más pronto posible.