Los líderes del G20 publicaron este lunes, en el primer día de la cumbre de Río de Janeiro, una declaración final básica, a pesar de que el presidente argentino, Javier Milei, adoptara un enfoque similar al de Donald Trump y la retirada del estadounidense Joe Biden a mitad de la jornada.
Brasil, que ocupa la presidencia rotativa del G20, logró desbloquear el foro al lograr un consenso entre las economías más poderosas del mundo sobre temas como los conflictos en Ucrania y Oriente Medio, la lucha contra el cambio climático y el impuesto a los superricos.
La reunión, celebrada en el Museo de Arte Moderno de Río, materializó estos esfuerzos, aunque con un lenguaje muy impreciso y sin metas concretas para abordar problemas que han tensado las relaciones internacionales como nunca antes desde la Guerra Fría.
“Profunda preocupación” por Oriente Medio y Ucrania
El G20 expresó así su “profunda preocupación por la catastrófica situación humanitaria en la Franja de Gaza y la escalada en el Líbano”, objeto de bombardeos e invasiones del Ejército israelí desde hace un año.
Respecto a Ucrania, que se aproxima a cumplir tres años bajo la invasión rusa, los líderes “destacaron el sufrimiento humano y las repercusiones negativas” relacionadas con la guerra “en materia de seguridad alimentaria y energética mundial, cadenas de suministro y estabilidad macrofinanciera”.
En ningún momento se nombró a Rusia, miembro del G20, al igual que EE.UU., la Unión Europea y China.
Milei hace de Trump
La declaración, compuesta por 85 puntos, también incluyó el compromiso de alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y acelerar las acciones para cumplirlos a tiempo.
Para ello, el G20 lanzó la Alianza Global contra el Hambre y la Pobreza, una iniciativa del presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, que cuenta con el respaldo de 82 países y el mandato de erradicar esta problemática, que actualmente afecta a 733 millones de personas.
Sin embargo, Milei, un crítico declarado de los ODS, anunció en un comunicado por separado que, por primera vez desde que Argentina es parte del G20, su gobierno “firmó la declaración de presidentes disociándose de todo el contenido relacionado con la Agenda 2030”.
A pesar de sus objeciones, estas no impidieron la divulgación del documento.
En línea con el magnate republicano Donald Trump, quien asumirá la presidencia de EE.UU. en enero, Milei calificó al G20 de “en crisis” y afirmó que no apoya lo que, a su juicio, limita la libertad de expresión en redes sociales y promueve “el esquema de imposición” de las instituciones de gobernanza global.
“Sea por malicia o ignorancia, la mayoría de los gobiernos modernos han insistido en el error de que para combatir el hambre y la pobreza se necesita mayor intervención estatal”, declaró durante su discurso en la primera plenaria, que contó con la presencia de Biden, Xi Jinping (China), Claudia Sheinbaum (México), Emmanuel Macron (Francia), Gabriel Boric (Chile), Gustavo Petro (Colombia) y Pedro Sánchez (España), entre otros líderes.