(CNN) — El huracán Delta tocó tierra la mañana de este miércoles en México, aproximadamente a medio camino entre las ciudades turísticas de Cancún y Playa del Carmen en la localidad de Puerto Morelos, según la última actualización del Centro Nacional de Huracanes.
Delta tiene vientos de 175 kilómetros por hora, lo que lo convierte en un fuerte huracán de categoría 2.
El huracán se abrirá paso rápidamente sobre Yucatán esta mañana y resurgirá en el Golfo de México más tarde este mismo día.
Una vez de regreso en aguas abiertas, es probable que Delta se fortalezca y se convierta en un gran huracán, antes de girar hacia el norte hacia la costa de Louisiana, en Estados Unidos.
Las alertas de huracanes y de marejadas ciclónicas probablemente se emitirán hoy a lo largo de la costa del Golfo de EE.UU.
La gente de toda la península se preparó para la tormenta del martes comprando suministros en las tiendas de comestibles, cubriendo edificios con madera contrachapada y haciendo fila para llenar grandes jarras de agua, mostró un video de TV Azteca, afiliada de CNN.
Decenas de turistas que fueron evacuados de sus hoteles fueron vistos con máscaras, sentados, acostados y charlando mientras esperaban el transporte, según las imágenes.
Otros fueron vistos esperando vuelos para salir del área, y muchos de estos fueron cancelados o retrasados debido a la tormenta.
Delta pasó de ser una depresión tropical a un huracán categoría 4 en aproximadamente 30 horas de lunes a martes.
En un momento, los vientos de Delta aumentaron en 136 km/h en 24 horas. Es el mayor incremento en la velocidad del viento de un ciclón en octubre desde el huracán Wilma en 2005. Este fue el último gran huracán que azotó Cancún.
Aunque Yucatán sobresale como un pulgar al sur del Golfo de México, solo seis huracanes han pasado a 80 kilómetros de Cancún en los últimos 100 años.
«Solo dos de ellos han sido grandes huracanes: Gilbert en 1988 (categoría 5 con vientos de 257 km/h) y Wilma en 2005 (categoría 4 con vientos de 210 km/h)», dijo el meteorólogo de CNN Brandon Miller.
Gilbert y Wilma fueron ciclones legendarios y «en realidad son las dos tormentas más intensas registradas por la presión más baja en la historia del Atlántico», dijo Miller.
Ambos fenómenos devastaron la industria turística de Cancún, que tardó años en reconstruirse.
Delta es actualmente «el huracán del Atlántico nombrado con el alfabeto griego más fuerte que se ha registrado», tuiteó Phil Klotzbach, científico investigador de la Universidad Estatal de Colorado.
Los impactos de Delta se sentirán hasta el miércoles en la península de Yucatán y Cuba, a medida que pase la tormenta.
Una marejada ciclónica de 2,7 a 4 metros por encima de los niveles normales de marea es posible a lo largo de gran parte de la costa norte de la península.
También es posible se registren cantidades de lluvia de 10 a 15 centímetros, con acumulaciones aisladas que alcancen los 25 centímetros. Además podrían ocurrir inundaciones repentinas y deslizamientos de tierra peligrosos en el oeste de Cuba.
Los gobernadores de Louisiana y Alabama declararon el estado de emergencia como preparación para la tormenta.
«El huracán Delta es una tormenta increíblemente peligrosa que traerá fuertes vientos, lluvia e inundaciones, y marejadas ciclónicas que amenazan la vida en la costa de Louisiana», sostuvo el gobernador de este estado, John Bel Edwards, en un comunicado.
«Todos en el sur de Louisiana deberían prestar mucha atención al clima en los próximos días y atender los consejos e instrucciones de sus funcionarios locales», añadió Edwards. «Toda la costa de Louisiana está en el cono de seguimiento, y somos muy conscientes de que los impactos se pueden sentir fuera de la trayectoria».
Edwards advirtió anteriormente a las parroquias costeras que es hora de prepararse para el huracán Delta. «Es común que muchas personas experimenten la fatiga de huracán durante una temporada alta, pero necesitamos que todos se tomen esta amenaza en serio», dijo Edwards.
La gobernadora de Alabama, Kay Ivey, dijo que el huracán podría tener un impacto significativo en el estado. Esto solo unas semanas después de la destrucción generalizada que dejó Sally en las áreas costeras.
«Como los residentes a lo largo de la Costa del Golfo saben muy bien, estas tormentas son impredecibles, y animo a todos a que se tomen en serio el huracán Delta», advirtió Ivey en un comunicado.
Las evacuaciones obligatorias de la costa de Alabama comenzarán este miércoles, dijo Ivey.
En Mississippi, la agencia estatal de manejo de emergencias envió 160.000 sacos de arena a tres condados en su costa sureste.
El Centro de Operaciones de Emergencia del Estado de Lousiana se activó desde marzo debido a la pandemia de coronavirus. Y todavía está lidiando con la recuperación del huracán Laura, que azotó el área en agosto.
Más de 6.600 personas que fueron evacuadas antes que Laura llegara permanecen alojadas en hoteles que se utilizan como refugios, dijo Edwards. Los evacuados de esa tormenta estuvieron en 42 hoteles diferentes al mismo tiempo. Y ahora se están consolidando en 10 en Nueva Orleans, uno en Baton Rouge y uno en el área de Lafayette.
Si Delta toca tierra en Louisiana, esta será la cuarta vez que una tormenta con nombre llega este año en el estado. Algo que nunca ha sucedido.
«La última temporada con tres tormentas que tocaron tierra fue 2005 con Cindy, Katrina y Rita, que afectaron las regiones más al suroeste y sureste de Louisiana», dijo a CNN Jhordanne Jones, investigadora de la Universidad Estatal de Colorado.
Desde México, se pronostica que la tormenta se moverá al oeste del Golfo de México del miércoles al jueves, pero no se espera que golpee la costa de Estados Unidos hasta la noche de viernes a sábado.
El Golfo puede ser propicio para que Delta mantenga su fuerza. Sin embargo, con tres días hasta que llegue a Estados Unidos, los pronósticos aún son inciertos, indicó el meteorólogo de CNN Pedram Javaheri.
El pronóstico actual sugiere que Delta tocará tierra en algún lugar entre la frontera de Texas y Louisiana hasta la frontera de Alabama y Florida como un huracán de categoría 3.
«Aunque todavía existe una incertidumbre significativa con respecto a la intensidad de Delta cuando se acerca a la costa norte del Golfo, es cada vez más probable que el sistema represente una amenaza significativa de vientos y marejadas ciclónicas en una parte de esa área», según el Centro Nacional de Huracanes.
Y se pronostica que el tamaño de la tormenta aumentará significativamente entre México y la costa de EE.UU., dijo el Centro Nacional de Huracanes. «Entonces, independientemente de la intensidad final de la llegada a tierra de Delta, es probable que el gran tamaño proyectado del huracán resulte en una marejada ciclónica y vientos significativos» en partes de la costa norte del Golfo, añadió.