Este espectáculo podrá verse en cielos despejados de toda América del Norte y América del Sur la noche del martes, y en África y Europa la mañana del miércoles.
Un eclipse lunar parcial ocurre cuando la Tierra pasa entre el Sol y la Luna, proyectando una sombra que oscurece una parte de la Luna, dándole el aspecto de una mordida.
Dado que la Luna se acercará a la Tierra un poco más de lo usual, aparecerá un poco más grande en el cielo. La superluna del martes es una de las tres que restan para este año.
“Se bloqueará una pequeña parte de la luz solar, por lo que la Luna aparecerá un poco más oscura”, señaló Valerie Rapson, astrónoma de la Universidad Estatal de Nueva York en Oneonta.
La Tierra, la Luna y el Sol se alinean para producir un eclipse solar o lunar entre cuatro y siete veces al año, de acuerdo con la NASA. Este eclipse lunar es el segundo y último del año, tras producirse un ligero oscurecimiento en marzo.
No se requiere ninguna protección visual especial para ver el eclipse. Los espectadores pueden ver la Luna a simple vista o utilizar prismáticos o telescopios para lograr una vista más cercana.
Para percibir la sutil reducción del tamaño de la Luna con el paso del tiempo, quédese afuera durante algunas horas o dé varios vistazos durante la noche, dijo KaChun Yu, curador del Museo de la Naturaleza y Ciencia de Denver
“Es posible que no vea ocurrir mucho de un minuto al otro”, dijo Yu.
Para una vista más espectacular de la Luna, los observadores del cielo pueden marcar su calendario para el 13 de marzo. La Luna será eclipsada totalmente por la sombra de la Tierra y se verá pintada de rojo por fragmentos perdidos de luz solar que se filtrarán a través de la atmósfera terrestre.