Hoy se celebra el Día Mundial de la Costurera, un homenaje que se realiza dentro del ámbito de las empresas de la industria textil, sindicatos y casas particulares. El objetivo en este día es agradecer a las costureras por su labor en la creación y confección de prendas.
A pesar de que la costura es un oficio muy antiguo, no existe mucha información acerca de esta festividad. Lo que sí se sabe es que las primeras especies necesitaron, a lo largo del tiempo, distintas prendas para evitar pérdida de calor corporal, confeccionadas en un principio utilizando pieles de animales.
Para principios del Siglo XX era común que las mujeres se dedicaran a la costura, sobre todo en las clases menos favorecidas. Por lo general, al cumplir con jornadas laborales excesivas, su salud se veía afectada culminando con enfermedades circulatorias y pulmonares.
Durante la pandemia reaparecieron diferentes técnicas de tejidos de ropas y accesorios como respuesta efectiva al trabajo manual.
Hoy día, con más tecnología y avance en la industria, la oferta de tejidos se ha diversificado, por lo que las confecciones manuales o prendas artesanales tienen gran valor para los apasionados de la moda.