Filipinas sufre el impacto de cinco tifones en menos de un mes

Pepito, un fenómeno meteorológico con vientos sostenidos de hasta 260 km/h y ráfagas que alcanzan los 305 km/h, ha tocado tierra en la isla de Luzón, provocando destrucción y poniendo en peligro la vida de miles de personas.

Filipinas experimento el impacto de cinco tifones consecutivos en menos de un mes, siendo el más reciente el Supertifón Pepito (Man-yi), que causó una devastación considerable en diversas regiones del país.

Pepito, un fenómeno meteorológico con vientos sostenidos de hasta 260 km/h y ráfagas que alcanzan los 305 km/h, ha tocado tierra en la isla de Luzón, provocando destrucción y poniendo en peligro la vida de miles de personas.

Antes de la llegada de este potente tifón, las autoridades filipinas implementaron medidas preventivas, evacuando a más de 500,000 personas en la región de Bicol, una de las áreas más afectadas por las tormentas anteriores.

Sin embargo, con la intensidad de Pepito, se prevé que esta cifra de desplazados aumente en las próximas horas, ya que las lluvias torrenciales y los vientos huracanados continúan azotando la región.

Pepito es solo el más reciente de una serie de ciclones que han afectado al país en noviembre. Los otros tifones que precedieron a este supertifón fueron Kong-rey (León), Yinxing (Marce), Toraji (Nika) y Usagi (Ofel). Es la primera vez en la historia del Pacífico Occidental que cinco sistemas ciclónicos están activos en un mismo mes de noviembre, generando un nivel de devastación que ha puesto en jaque la capacidad de respuesta del país.

Los tifones, que en esta región asiática se denominan así en lugar de “huracanes”, han dejado a su paso un rastro de inundaciones, deslizamientos de tierra y daños en infraestructuras, afectando tanto a comunidades rurales como urbanas. La situación es crítica, ya que Filipinas sigue recuperándose de los daños ocasionados por los ciclones anteriores cuando llegó Pepito con fuerza devastadora.

Las autoridades meteorológicas han advertido que, debido al cambio climático y al aumento de la temperatura en los océanos, fenómenos de esta magnitud podrían volverse más frecuentes e intensos en los próximos años. Mientras tanto, el pueblo filipino enfrenta otro desafío en medio de la temporada de tifones, demostrando una vez más su resiliencia ante las inclemencias de la naturaleza.

La comunidad internacional ha comenzado a movilizarse para ofrecer apoyo, mientras los equipos de rescate y socorro en Filipinas luchan por llegar a las zonas más afectadas y brindar asistencia a las familias que lo han perdido todo.