Francia controla en todas sus fronteras las nuevas restricciones a los viajes

PARÍS.- Las autoridades francesas han recibido el encargo de hacer respetar las nuevas restricciones a los viajes desde el extranjero por la covid, que se vienen a añadir a los controles en las fronteras con sus vecinos europeos que a inicios de noviembre Francia había reforzado por el riesgo terrorista.

Desde el domingo están prohibidos con carácter general los desplazamientos entre Francia y cualquier país exterior al Espacio Económico Europeo (los de la UE, Andorra, Islandia, Liechtenstein, Mónaco, Noruega, San Marino, Suiza y el Vaticano) en uno u otro sentido.

Las únicas excepciones son para los que puedan justificar un “motivo imperioso de carácter personal o familiar, por motivo sanitario urgente o por razones profesionales que no se pueden aplazar”.

Entre esos “motivos imperiosos” están la vuelta a la residencia principal, si se encuentra en Francia, pero también la muerte de un familiar por línea directa, el inicio o reanudación de estudios o una urgencia médica vital.

El secretario de Estado de Asuntos Europeos, Clément Beaune, precisó este lunes en la emisora France Inter que “si no se reconoce como imperioso el motivo, no se puede embarcar” en el avión.

Los que puedan justificarlo tendrán además que presentar un test PCR negativo realizado como máximo hasta 72 horas antes del embarque que las compañías aéreas tendrán que verificar.

Al llegar a Francia, hay que ponerse en cuarentena durante siete días y al cabo de ese periodo someterse a un nuevo test de covid.

Beaune hizo notar que la semana pasada ya hubo una compañía, Ethiopian Airlines, que vio suspendidos todos sus vuelos a Francia porque hacía la vista gorda con las pruebas PCR o aceptaba algunas falsificadas, y que esta semana alguna otra compañía -cuyo nombre no quiso avanzar- que recibirá la misma sanción.

RESTRICCIONES DENTRO DEL ESPACIO EUROPEO

En cuanto a los viajes hacia o desde los países del Espacio Económico Europeo son posibles sin tener que justificar un motivo para entrar en Francia, las autoridades demandan un test PCR negativo (realizado también hasta 72 horas antes como máximo) y no solo para trayectos en avión o en barco, sino desde el domingo también para los que se hacen por carretera y por tren.

Los únicos que quedan exentos de esa prueba PCR son los camioneros, los trabajadores transfronterizos (hay 350.000 en Francia que tienen su empleo en países vecinos) y las personas que tienen su residencia a menos de 30 kilómetros de la frontera.

Además, junto al test al llegar a Francia desde un país del Espacio Económico Europeo se recomienda “fuertemente” aislarse durante siete días y realizar un nuevo test de covid al cabo de ese tiempo.

Fuentes del Gobierno precisaron a Efe que, teniendo en cuenta los importantes flujos en los pasos fronterizos terrestres, los controles allí serán “aleatorios”.

El presidente francés, Emmanuel Macron, decidió a comienzos de noviembre generalizar los controles a los viajeros de otros países del espacio Schengen después de la ola de atentados yihadistas perpetrados desde comienzos del otoño.

El último de esos atentados, en una iglesia de Niza donde fueron asesinadas tres personas, lo cometió un joven tunecino que había entrado en Europa por la isla italiana de Lampedusa y que, después de circular durante varias semanas por Italia se introdujo en Francia sin ser controlado.

Ese reforzamiento de los controles fronterizos ha supuesto, entre otras cosas, el cierre de pasos fronterizos secundarios de Francia con España para no tener que desplegar allí agentes de control.