Fuertes lluvias en Costa Rica dejan tres fallecidos y cinco personas desaparecidas

La presidenta de la Cruz Roja costarricense, Dyanne Marenco, informó este lunes sobre el impacto de las tormentas, las cuales fueron intensificadas por ondas tropicales y los efectos indirectos de las tormentas tropicales Rafael y Sara. 

En las últimas dos semanas, intensas lluvias afectaron a Costa Rica, causando la muerte de tres personas y la desaparición de otras cinco, especialmente en las provincias de Guanacaste y Puntarenas, ubicadas en la costa del Pacífico. 

Las precipitaciones también provocaron severas inundaciones en varias comunidades de la región.

La presidenta de la Cruz Roja costarricense, Dyanne Marenco, informó este lunes sobre el impacto de las tormentas, las cuales fueron intensificadas por ondas tropicales y los efectos indirectos de las tormentas tropicales Rafael y Sara. 

Marenco destacó que, aunque las lluvias han disminuido, las labores de búsqueda de los desaparecidos y la asistencia a los afectados continúan.

La Comisión Nacional de Emergencias (CNE) anunció una reducción en el nivel de alerta: las provincias de Guanacaste y Puntarenas pasaron de alerta roja a naranja, mientras que en el centro y norte del país la alerta descendió de naranja a amarilla. 

En la provincia caribeña de Limón, la alerta bajó de amarilla a verde, indicando una fase preventiva.

«Se reporta una disminución general de la saturación de los suelos, sin embargo, aún hay cuencas con saturación importante, principalmente en la zona montañosa norte, Guanacaste, zona sur y Valle Central», advirtió la CNE.

Pese a la mejora en las condiciones climáticas, comunidades de las provincias de Guanacaste y Puntarenas siguen afectadas por las inundaciones, por lo cual las autoridades continúan con las labores de entrega de ayuda humanitaria.

Hasta 3.057 personas llegaron a estar resguardadas en medio centenar de albergues, pero poco a poco están regresando a sus hogares.

El pasado miércoles el Gobierno de Costa Rica decretó emergencia nacional con el fin de agilizar los procesos para atender la emergencia, la distribución de recursos económicos y humanos, las contrataciones para reconstrucción o habilitación de carreteras, entre otros temas.

Desde el martes un grupo de 300 rescatistas enviados por el Gobierno de El Salvador junto con cargamentos de ayuda humanitaria, colaboran en la atención de la emergencia.

La llegada de estos rescatistas ha generado polémica en el Congreso de Costa Rica, ya que entre ellos vienen militares salvadoreños, cuyo ingreso, según bancadas de oposición, debió ser aprobado por el Legislativo de acuerdo a la Constitución Política.