Algunos de los altos funcionarios detenidos como parte de una nueva "cruzada" contra la corrupción en Venezuela están involucrados en una red de prostitución al servicio de políticos y empresarios, reveló bajo reserva a la AFP una fuente ligada a las investigaciones.
Desde la semana pasada, cuando la Policía Nacional contra la Corrupción (PNCC), anunció una "investigación profunda" a funcionarios incursos en "corrupción administrativa y malversación de fondos" se detuvo a altos funcionarios y "testaferros" que actuaban bajo la fachada de empresarios.
Al menos tres de los detenidos, según la prensa, tienen vínculos con el poderoso Tareck El Aissami, quien renunció este lunes al cargo de ministro de Petróleo que ocupaba desde 2020, salpicado por el nuevo escándalo en la estatal PDVSA sobre la que cursan unas 25 investigaciones desde 2017 que han dejado un centenar de gerentes y empleados presos.
Arrestado el domingo, el diputado y exministro de Educación Universitaria, Ciencia y Tecnología, Hugbel Roa, considerado un cercano colaborador de El Aissami, esuno de los creadores de la criptomoneda venezolana Petro respaldada en las reservas de crudo del país.
Roa, a su vez, tenía como su "testaferro" al empresario Alejandro Arroyo, "dueño de una mansión en el Country Club (una exclusiva urbanización de Caracas), una inmensa flota de camionetas y equipos de fútbol", añadió la fuente.
"Y lo grave es que manejaba una red de prostitución al servicio de este grupo donde captaban a jovencitas para que les sirvieran de damas de compañía", subrayó el informante.