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Al menos 32 personas perdieron la vida entre el domingo y el lunes en ataques armados contra dos comunidades del estado de Benue, en el centro de Nigeria, confirmaron este martes a EFE fuentes involucradas en la investigación.
«Los hombres armados, en número de más de 200, invadieron nuestra localidad (Katsina Ala) y Logo el domingo por la noche y el lunes por la mañana y mataron a tiros a 32 personas», declaró a EFE por teléfono Joseph Akute, un líder comunitario de Katsina Ala.
En su localidad, “mataron a doce personas”, y en la vecina Logo, “a veinte”. Además, “más de 40 personas resultaron heridas en el ataque”, explicó Akute.
«Llevaban armas sofisticadas y dispararon esporádicamente antes de matar a las víctimas. Por ahora, no puedo decir por qué atacaron porque no lo hemos averiguado, pero, si tengo que adivinar basándome en lo que hacen los fulanis, probablemente atacaron para desplazar a nuestra gente y apoderarse de nuestra tierra», denunció.
Akute enfatizó la necesidad de reforzar el trabajo de las fuerzas de seguridad para poner fin a las matanzas en el estado.
Por su parte, Joseph Anawah, líder de la comunidad de Logo, indicó a EFE que al menos 30 personas resultaron heridas durante los ataques en Katsina Ala y Logo. También acusó a los pastores fulani de ser responsables de los ataques contra las comunidades.
«En estos momentos, muchas personas han huido de las áreas afectadas por miedo a sufrir nuevos ataques», apuntó.
La portavoz de la Policía en Benue, Catherine Anene, confirmó los hechos y señaló que, hasta el momento, solo se han recuperado cinco de los cuerpos.
A pesar de que la investigación sobre el ataque sigue en curso, se sospecha que fueron pastores de la etnia fulani, en su mayoría musulmanes, quienes suelen enfrentarse a comunidades de campesinos, mayoritariamente cristianos, por diferencias en el uso de la tierra y los recursos naturales.
El estado de Benue se sitúa en la zona que divide el norte mayoritariamente musulmán y el sur mayoritariamente cristiano del país, y ha soportado este tipo de choques, además de tensiones étnicas y religiosas, durante años.
Asimismo, algunos estados, especialmente del centro y noreste del país, sufren constantes ataques de bandidos, término que se utiliza en Nigeria para referirse a grupos armados que realizan secuestros y robos, y a los que las autoridades a veces catalogan como “terroristas”.