Santo Domingo, RD.- Al leer la segunda de las siete palabras que pronunció Jesús durante su crucifixión, Ángela Cabrera, fundadora de la Comunidad Misionera por la Santidad, a quien la Iglesia Católica delegó esta misión, abogó por el reconocimiento de la mujer como ciudadana y como hija de Dios, momento que aprovechó para recordar a todas las féminas que son víctimas de muertes maternas, fallecimientos que, dijo, pueden ser evitables.
Cabrera cuestionó, también, que hombres adultos convivan con niñas, las cuales procrean a una edad que las hunden en la pobreza.
Al pronunciar la palabra: “Yo te aseguro que hoy estarás conmigo en el paraíso”, sostuvo que se encontraba allí en laCatedral Primada de Américapara recordar el “grito de otras mujeres” que le dicen “acuérdate de nosotras cuando hables para que no nos cierren las puertas del paraíso”.
Sostuvo que esas son las mujeres víctimas de los partos por cesáreas, operaciones que se producen en el país en un porcentaje que asciende al 58.1 y a pesar de que la Organización Mundial de la Salud recomienda entre un 10 y un 15 por ciento.
La fundadora de Comunidad Misionera por la Santidad consideró que las muertes maternas son el “drama” de una “deuda social acumulada” con la mujer, cuando estos decesos podrían ser “felizmente evitables”.
“El 85 por ciento de las mismas están relacionadas con la falta de calidad de la atención sanitaria”, agregó.
Condenó, asimismo, la violencia contra la mujer, cuyas víctimas también “gritan sin voz tantas mujeres silenciadas a la fuerza”.