Los Dodgers obtienen su pase a la Serie de Campeonato

El puertorriqueño Kiké Hernández y el dominicano Teoscar Hernández conectaron jonrones que respaldaron al japonés Yoshinobu Yamamoto, llevando a los Dodgers de Los Ángeles a una victoria por 2-0 sobre los Padres de San Diego en el quinto encuentro de la Serie Divisional de la Liga Nacional.

Con esta victoria, los Dodgers (3-2) se ganaron el derecho a enfrentar a los Mets de Nueva York en la Serie de Campeonato de la Liga Nacional, que comenzará el próximo domingo en el Dodger Stadium, donde celebraron su triunfo ante su afición este viernes.

Yoshinobu Yamamoto (1-0) cumplió con una destacada actuación, lanzando cinco entradas en las que permitió solo dos imparables y dos bases por bolas, mientras ponchó a dos bateadores. Su control fue clave, colocando 39 de sus 63 lanzamientos en la zona de strike, lo que mantuvo a la ofensiva de los Padres sin ritmo durante todo el partido.

En el duelo de lanzadores japoneses, Yu Darvish (1-1) también tuvo una buena actuación, lanzando 6.2 entradas con tres hits permitidos, un boleto y cuatro ponches, pero terminó cargando con la derrota.

El primer jonrón llegó en la segunda entrada, cuando Kiké Hernández conectó un lanzamiento de Darvish, enviando la pelota sobre la pared entre los jardines central e izquierdo, poniendo a los Dodgers al frente. Este fue el tercer cuadrangular de Hernández en juegos decisivos de la postemporada, empatando con figuras como el venezolano José Altuve y el Salón de la Fama, Yogi Berra, solo detrás de Aaron Judge.

Los Padres intentaron empatar en el tercer episodio, conectando indiscutibles consecutivos, pero Yamamoto logró dominar a Fernando Tatis Jr. con un rodado que resultó en una doble matanza, cerrando la entrada sin daño.

La ventaja se amplió a 2-0 en el séptimo inning, cuando Teoscar Hernández detonó un slider de Darvish, enviando la pelota a las gradas del jardín izquierdo.

El manager Dave Roberts utilizó a los relevistas Evan Phillips, Alex Vesia, Michael Kopech y Blake Treinen, quien se llevó el salvamento, extendiendo a 23 las entradas consecutivas sin permitir anotaciones a los bateadores de los Padres, convirtiendo a su cuerpo de lanzadores en una fortaleza, a pesar de ser su principal debilidad en la serie.

Los relevistas Jason Adam y Tanner Scott también respondieron al dirigente de los Padres, Mike Shildt, quien vio a sus bateadores tener dificultades, logrando solo dos imparables en todo el encuentro.