Protestan frente a la SCJ por cambio de medida a implicado en Operación Nido

Los afectados condenaron que se le haya variado la prisión preventiva a Enmanuel Rivera Pichardo, hijo de Rivera Ledesma, por presentación periódica, garantía económica e impedimento de salida.

Las víctimas del fraude inmobiliario conocido como Operación Nido se manifestaron frente a la Suprema Corte de Justicia (SCJ), en rechazo a la variación de la medida de coerción otorgada al hijo de Emmanuel Rivera Ledesma, señalado como el principal implicado en la estafa.

Los afectados condenaron que se le haya variado la prisión preventiva a Enmanuel Rivera Pichardo, hijo de Rivera Ledesma, por presentación periódica, garantía económica e impedimento de salida.

De igual forma, solicitaron a las autoridades que publiquen la lista de bienes incautados a los implicados en esta red, alegadamente declarada por Rivera Ledesma por unos 20 millones de dólares.

Sobre el caso, según la Procuraduría

El pasado 3 de enero el órgano acusador puso en marcha la Operación Nido, con la cual quedó desmantelada una red que estafó con más de 700 millones de pesos a personas a las que ofertaba viviendas en supuestos proyectos inmobiliarios, a través de múltiples maniobras fraudulentas.

En el despliegue de la Operación Nido, el Ministerio Público y la Policía Nacional realizaron veinticinco (25) allanamientos en San Cristóbal, Dajabón, Espaillat, Sánchez Ramírez y el Distrito Nacional.

La investigación realizada por el Ministerio Público arrojó que la red criminal utilizó los vehículos societarios Indisarq, SRL, CRD Equipos Pesados, SRL, el Grupo Wimar, SRL y Auto Xperts AFM SRL, a través de las que crearon un esquema inmobiliario fraudulento para la ejecución de estafas, falsificación, asociación de malhechores y lavado de activos en perjuicio de las víctimas a las que ofertaban viviendas a través de siete proyectos inmobiliarios.

Durante la investigación se ocuparon evidencias que demuestran que el imputado Emmanuel Rivera Ledesma utilizaba nombres de personas reconocidas para hacer creer a las víctimas que estaba protegido por personalidades a quienes realmente ni siquiera conoce. Por igual, se recabaron evidencias de la ostentosa vida que llevaban varios miembros de la red con el dinero obtenido de las víctimas.

A raíz de la investigación, el imputado Emmanuel Rivera Ledesma inició una serie de maniobras con el objetivo de que las víctimas no se querellarán en su contra o retiraran las querellas ya presentadas.

También buscó que las víctimas le firmaran nuevos contratos e hicieran otras acciones tendentes a obstruir el proceso de investigación, lo que evidencia que el imputado y otros miembros de la red deben cumplir una medida de coerción que les impida destruir evidencias y ser una amenaza clara para las personas estafadas.