Rusia está firmemente comprometida a mantener el diálogo sobre Siria

Los grupos yihadistas, liderados por Hayat Tahrir al Sham, lanzaron una ofensiva desde la provincia de Idlib hace casi dos semanas, lo que desencadenó la mayor escalada de la guerra civil en Siria desde 2019.

El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, comunicó este lunes que Rusia está firmemente comprometida a mantener el diálogo sobre Siria con todos los países regionales y aseguró que Damasco se enfrentará a un periodo "muy difícil" de inestabilidad.

"Estamos dialogando con otros Estados de la región, también sobre los asuntos sirios. De hecho, en Siria ahora habrá un período muy difícil asociado a la inestabilidad y, por supuesto, es muy importante mantener el diálogo con todos los países regionales en este sentido. Tenemos la firme intención de hacerlo, consultaremos y analizaremos", indicó Peskov, respondiendo a una pregunta sobre si Moscú mantiene con Ankara un diálogo sobre la situación en Siria.

Al mismo tiempo, el vocero señaló que lo ocurrido en Siria "sorprendió probablemente a todo el mundo", y Rusia no fue una excepción. "Ahora vemos que [en el país] tal período de transformación, la inestabilidad extrema. Así que, por supuesto, se necesitará tiempo, y luego se necesitará una conversación seria con los que serán investidos con el poder", subrayó.

En este contexto, Peskov aseguró que el Ejército ruso está tomando las medidas de precaución necesarias para garantizar la seguridad de sus bases militares en Siria. Además, según el portavoz, aún es prematuro hablar del mantenimiento de la presencia militar rusa en el país. "Es prematuro hablar de ello todavía. En cualquier caso, todo esto es un tema de discusión con quienes estarán en el poder en Siria", señaló.

Los grupos yihadistas, liderados por Hayat Tahrir al Sham, lanzaron una ofensiva desde la provincia de Idlib hace casi dos semanas, lo que desencadenó la mayor escalada de la guerra civil en Siria desde 2019. La mañana del 8 de diciembre, las milicias armadas anunciaron la "caída" del Gobierno de Bashar al Assad, la toma de Damasco y la liberación de todos los presos de la cárcel de Saydnaya, una de las mayores de la capital.