Tifón Yagi deja más de 230 muertos y millones de afectados en el Sudeste Asiático

Las inundaciones y deslizamientos de tierra que han afectado a varios países del Sudeste Asiático tras el paso del tifón Yagi han dejado más de 230 muertos y millones de damnificados, especialmente en Vietnam.

Según consignó Emol, las intensas lluvias y los fuertes vientos afectaron gravemente el norte del país, donde las autoridades informaron este jueves de 199 muertos y 128 desaparecidos.

Uno de los principales focos de los operativos de búsqueda y rescate es la aldea de Lang Nu, en la provincia norteña de Lao Cai, donde un deslizamiento de rocas y lodo sepultó decenas de viviendas esta semana, dejando un saldo provisional de 34 muertos y 61 personas desaparecidas.

Mediante un comunicado, Unicef informó que alrededor de 19 millones de personas, incluidos 5,5 millones de niños, residen en las zonas de Vietnam afectadas por el tifón Yagi, el más fuerte del año en Asia.

Según los datos proporcionados por esta agencia de la ONU, más de 141.000 viviendas sufrieron daños, además de 550 centros de salud y aproximadamente 800 escuelas: “Las autoridades nacionales han emitido una alerta por las fuertes lluvias que seguirán cayendo, con inundaciones repentinas y deslizamientos de tierra que siguen devastando aldeas del norte del país, donde viven un gran número de comunidades vulnerables, incluidas minorías étnicas”.

La Autoridad de Gestión de Desastres señalaron que unas 100.000 viviendas quedaron completamente sumergidas, mientras que unos 1,5 millones de cabezas de ganado han muerto. Además, se estima que las fuertes lluvias han dañado cerca de 200.000 hectáreas de cultivos de arroz y casi 16.000 árboles frutales.

La situación ha llevado este jueves al Gobierno australiano a prometer el envío de tres millones de dólares australianos (1,8 millones de euros) en ayuda humanitaria al país asiático, tal y como ha anunciado la ministra de Exteriores, Penny Wong, que ha asegurado que el apoyo de Canberra busca ofrecer una “respuesta rápida y una recuperación pronta a los más vulnerables, entre ellos menores y personas con discapacidades en áreas remotas”.