Zelenski mantiene cautela ante el permiso para usar misiles de largo alcance contra Rusia

Durante su discurso diario, Zelenski señaló que estas armas "hablarán por sí solas", sin confirmar directamente la autorización recibida.

El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, se mostró reservado tras el anuncio de Washington que permite a Kiev utilizar misiles estadounidenses de largo alcance en territorio ruso. 

Durante su discurso diario, Zelenski señaló que estas armas "hablarán por sí solas", sin confirmar directamente la autorización recibida.

Un funcionario estadounidense comunicó a la AFP que Estados Unidos ha dado "luz verde" al uso de estos misiles, un cambio estratégico que Ucrania había solicitado desde hace tiempo para enfrentar la invasión rusa iniciada en febrero de 2022.

Zelenski destacó la relevancia de la "capacidad de largo alcance" de sus fuerzas armadas y mencionó que "hoy, numerosos medios informan que hemos recibido la autorización de tomar medidas adecuadas", subrayando la importancia del respaldo en este aspecto crucial del conflicto.

"Pero los bombardeos no se llevan a cabo con ayuda de las palabras. Cosas como esta no se anuncian", añadió. "Los misiles hablarán por sí solos", subrayó.

Este anuncio se produce poco antes de la salida de Joe Biden de la Casa Blanca y el regreso del republicano Donald Trump, muy crítico respecto a la ayuda estadounidense a Ucrania.

Kiev teme que el futuro presidente suprima la ayuda financiera que le suministra o intente forzar a Ucrania a concluir un acuerdo con Rusia.

Zelenski reclama desde hace meses la autorización de utilizar los misiles Storm Shadow británicos y los misiles estadounidenses ATACMS para atacar objetivos más al interior del territorio ruso.

Estas armas de un alcance máximo de varios cientos de kilómetros permitirían a Ucrania llegar a centros logísticos del ejército ruso y a los aeródromos desde donde despegan sus bombarderos.

Pero varios países, incluido Estados Unidos, se negaban hasta ahora a dar luz verde, por temor a una escalada con Moscú.

El presidente ruso, Vladimir Putin, advirtió que tal decisión significa que "los países de la OTAN están en guerra contra Rusia".