Santo Domingo.– Los directores de migración o sus representantes de Centroamérica y República Dominicana se reunirán el lunes y martes próximos en este último país para discutir sobre ese tema, así como de derechos humanos y desarrollo.
A la asamblea de la Comisión Centroamericana de Directores de Migración, a celebrarse en Punta Cana (este), participarán delegaciones de Costa Rica, República Dominicana, El Salvador, Honduras, Nicaragua, Guatemala, Panamá y Belice.
El encuentro regional, dado a conocer este viernes por la Dirección General de Migración (DGM) dominicana, también tratará sobre la cooperación en seguridad, protección, vigilancia, prevención y modernización de las fronteras, controles integrados y mejoras tecnológicas.
Asimismo, se prevé discutir sobre las legislaciones, acuerdos internacionales y mecanismos políticos para lograr estabilidad de método, regularización de los programas migratorios y fortalecer la lucha contra el tráfico de migrantes.
La DGM aseguró que durante la reunión se demostrará “una vez más» que el país aplica una “correcta ejecución de las leyes y normas migratorias”, que incluyen aplicación de los protocolos, respeto a los derechos humanos y trato humanitario.
República Dominicana ejecuta un programa de deportación de ciudadanos en condición migratoria irregular, la mayoría de ellos de nacionalidad haitiana.
El presidente dominicano, Luis Abinader, dijo este viernes que “la comunidad internacional tiene la obligación de acudir en ayuda de Haití para superar los sufrimientos que soporta ese pueblo».
Durante la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno del Sistema de la Integración Centroamericana (SICA) que se celebra en Santiago (norte de República Dominicana), Abinader subrayó esa “obligación» también para que el Gobierno de Haití “pueda asumir mayor nivel de responsabilidad frente a los países de su entorno” en lo que respecta a la migración.
Al término de la cumbre, el ente regional hizo suyo el “urgente» llamamiento que, al inicio del cónclave, formuló el Ejecutivo dominicano a la comunidad internacional para que se atienda la “grave crisis” que atraviesa Haití.
En el documento final de la reunión, los Estados que conforman el SICA expresaron su “preocupación por la grave situación que afecta a la República de Haití, en los ámbitos económico, social, político y humanitario, que obstaculiza el desarrollo de sus instituciones y ciudadanos».