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Crecimiento espiritual, libertad, y prosperidad, los factores que envuelven a las figuras religiosas en casos de estafas y mentiras, visualizados como entes espirituales en sus redes sociales que promueven la palabra de Dios, los líderes de la fe terminan expuestos en escándalos por corrupción o engaño.
En el caso más reciente figura la presunta pastora Elizabeth Silverio, quien tras un reportaje de la periodista Nuria Piera donde fue expuesta por supuesta falsificación de sus títulos académicos, como neurocientifica, y su cargo como religiosa.
De acuerdo a una colaboradora de la Iglesia Somos Adoradores, Elizabeth no es pastora del templo, aunque en su entra de Instagram, la religiosa había publicado un certificado que la acreditaba como miembro activoi de esa congregación.
Tras esto, el departamento jurídico del Ministerio de Salud Pública sometió ante la Fiscalía Especializada en Salud una querella en contra de Elizabeth Silverio, por ejercer sin poseer el exequátur que establece la Ley 42-01.
Al Elizabeth presentarse como "neurocientífica especializada en niños con autismo" sin contar con el debido exequatur, podría cumplir hasta diez años de condena.
Sin embargo, este no es el único caso de falsificación o estafa en el país.
Jairo González, un religioso que fue arrestado durante un allanamiento en una villa del municipio Jarabacoa, en La Vega, por su supuesta implicación en una estafa millonaria, utilizando criptomonedas y otros mecanismos.
El Ministerio Público inició con la investigación luego de que más de 30 personas denunciaran ser víctimas de estafa por más de RD$100 millones, tras supuestamente invertir altas sumas de dinero en la empresa de trading de González.
El Juzgado de Atención Permanente del Distrito Nacional dictó 18 meses de prisión preventiva, como medida de coerción en contra este deboto quien dejó hasta el momento del dictamen más de 160 querellas.
Otro es el caso de Rossy Maybelline Guzmán Sánchez, la pastora de la Iglesia Shalom Tierra de Paz, imputada por el Ministerio Público en operación Coral, por ser miembro de una supuesta red que estafaba al Estado, en los años 2017-2019, durante el mandato del ex presidente Danilo Medina.
A Guzmán se le dictó prisión preventiva en 2020, y más adelante se le varió la medida a arresto domiciliario y grillete electrónico, con una garantía económica de RD$50 millones.
Actualmente, su caso continúa en los tribunales junto a otros miembros que operaban con ella en la supuesta red de corrupción.
La pastora Juana Felicia Guillén, propietaria del Colmado Juana, ubicado en el distrito municipal al La Victoria, fue acusada por el Ministerio Público de establecer un fraude con las tarjetas del programa social Supérate con transacciones fraudulentas por más de un millón de pesos.
Yahaira Encarnación Brito, es una de las implicadas en la lista por casos de corrupción al Estado.
La pastora es parte de los imputados en operación Calamar.
Al ser cuestionada por la prensa en uno de los traslados a la sala de audiencia, la líder religiosa dijo estar “bendecida, prosperada y en victoria”.
Encarnación Brito está cumpliendo arresto domiciliario como medida de coerción.