El precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) empezó la semana de cuatro días, por el festivo del lunes del Día del Trabajo, con una bajada del 3.11%, colocándose en US$71.26 el barril, cuando los inversores tienen los ojos puestos en los próximos pasos de la OPEP+.
Al comienzo de la jornada en la Bolsa Mercantil de Nueva York (Nymex), los contratos de futuros del WTI para entrega en octubre restaron US$2.29 con respecto a la sesión del jueves.
Los inversores están a la espera de que la Organización de Países Exportadores de Petróleo y sus aliados, conocida como OPEP+, anuncie si finalmente incrementará la producción de crudo en octubre.
Según los medios especializados, la organización se dispone a proceder con un aumento de la producción de petróleo, en parte debido a las interrupciones en Libia y el recorte de producción en Irak.
El WTI terminó el viernes en el nivel de cierre semanal más bajo desde finales de enero, justo por debajo de los US$74 por barril. En lo que va del año, el crudo estadounidense ha ganado un 1%.
“De cara al futuro, las preocupaciones por la demanda vinculadas a la amenaza de una desaceleración del crecimiento global están actuando como la mayor influencia en el mercado petrolero en este momento”, anota este martes Tom Essaye en su informe ‘The Sevens Report’.
Persisten las dudas sobre la demanda de combustibles en China, uno de los mayores consumidores del mundo. La producción manufacturera en China cayó a un mínimo de seis meses en agosto, según datos publicados durante el fin de semana.