Un juez federal de Texas declaró ilegal un programa del presidente Joe Biden que acelera el proceso de obtención de estatus legal para cónyuges extranjeros de estadounidenses.
Esta decisión ocurre en un contexto de creciente preocupación tras las amenazas de deportación formuladas por el presidente electo Donald Trump.
En una resolución emitida este jueves, el juez de distrito J. Campbell Barker determinó que la administración Biden "carece de autoridad legal" para implementar su programa "parole in place", lo que supone un duro golpe a la política migratoria del mandatario demócrata, quien dejará el cargo en enero de 2025.
El plan de Biden, titulado "Keeping Families Together" (Mantener a las Familias Unidas), fue lanzado en junio y busca beneficiar a al menos medio millón de inmigrantes en Estados Unidos.
Sin embargo, el fiscal general de Texas, Ken Paxton, un aliado de Trump, junto a un grupo de colegas republicanos, demandó al Departamento de Seguridad Nacional por la aplicación de esta medida. Paxton argumentó que se estaba "recompensando" a quienes "violaron las leyes".
"Se detiene el intento de la administración Biden/Harris de eludir las leyes de inmigración", dijo en la red social X el fiscal general de Idaho, Raúl Labrador.
Mientras los demócratas buscaban un equilibrio entre sanciones a los arribos ilegales y reformas migratorias, Trump aseguró que Estados Unidos está sometido a una "invasión" y, tras vencer el 5 de noviembre en las elecciones presidenciales a Kamala Harris, reiteró sus promesas de "deportaciones masivas" de migrantes irregulares.
El juez Campbell, nominado durante el primer mandato de Trump, ya había acogido el pedido de Paxton y suspendido temporalmente el programa en agosto. Una apelación lo reactivó pero el juez volvió a bloquearlo, hasta que este jueves dio su veredicto final. El gobierno de Biden puede apelar.