La Dirección General de Pasaportes (DGP) anunció que abrió un proceso de licitación con miras a lograr la implementación del pasaporte biométrico para el 2025, un proyecto que posicionaría a la República Dominicana como un país a la vanguardia en la emisión de documentos de viaje.
Esta licitación cuenta con un riguroso pliego de condiciones, que incluyen: adquisición de materiales como policarbonato, microchip, software y hardware, que aumentan los niveles de seguridad, disminuyendo el riesgo de suplantación o falsificación de identidades, aseguró la entidad.
Lorenzo Ramírez, director general de Pasaportes, explicó que se trata de una implementación compleja por las grandes exigencias tecnológicas, de inversión y de seguridad que conlleva, no obstante, aseguró que la institución emitirá el primer pasaporte electrónico en 2025.
Durante un encuentro con la prensa Ramírez destacó las acciones para posicionar la institución como un referente de eficiencia en el servicio público mediante la implementación de un plan de modernización integral.
“En cuestión de semanas logramos estabilizar el sistema electrónico de citas, gracias a la parametrización de los procesos. De esa forma eliminamos las filas en la institución. Estamos comprometidos a que esto no vuelva a ocurrir”, declaró Ramírez en un encuentro con la prensa.
Informó que se ampliaron los horarios de atención de las oficinas del Sambil y Megacentro hasta los sábados y que dentro de sus proyectos a largo plazo espera implementar servicios como la entrega del pasaporte a domicilio.
Acerca de la actual sede de la DGP informaron que esta es una edificación erigida en la década de 1970, que su diseño representa limitaciones en los espacios para el equipamiento tecnológico de las demandas actuales y que no cuenta con ascensores u otros accesos para personas con discapacidad.
En ese sentido, se prevé la mudanza de la sede a un nuevo edificio, lo que, según la entidad, representa la apertura de una nueva oficina y ampliación de los servicios, con las instalaciones necesarias para la comodidad de los usuarios, eficientizando los sistemas de citas y reduciendo los tiempos de espera para garantizar un servicio más eficiente.
“En la edificación actual se mantendrá parte de nuestras operaciones, pero el grueso pasará a una infraestructura mucho más adecuada a nuestro funcionamiento actual y sobre todo a los planes de modernización”, acotó Ramírez.