Este martes, ciudadanos y autoridades locales salieron a las calles de Santa Cruz, la mayor región de Bolivia, para manifestarse contra la grave crisis económica que afecta a la población.
La escasez de combustible, la falta de dólares y el aumento de los precios de productos básicos son algunos de los problemas que han generado el descontento popular.
"Nos manifestamos por la falta de políticas del Gobierno a favor de los ciudadanos. No habrá alimentos en el próximo año, todos los bolivianos debemos salir a la calle", expresó Stello Cochamanidis, vicepresidente del Comité Cívico pro Santa Cruz.
Los manifestantes se concentraron en las principales avenidas de la ciudad, portando banderas de la región en verde y blanco, además de carteles con mensajes de protesta contra el Gobierno de Luis Arce.
"Queremos hacerle entender a este Gobierno que estamos descontentos con este modelo económico que salió a decir que es un éxito, nosotros le decimos no", dijo un ciudadano que no dio su nombre en uno de los puntos de concentración.
El gobernador en funciones de Santa Cruz, Mario Aguilera, también se unió a la manifestación.
"Estamos en una situación tremendamente compleja, pone en vilo el futuro inmediato (…) Es la primera medida y es una llamada de atención a nuestro Gobierno nacional", afirmó Aguilera.
El candidato presidencial y rector de la Universidad Autónoma Gabriel René Moreno (Uagrm), Vicente Cuéllar, aseguró que la movilización es un "rechazo a la forma en cómo se ha ido administrando este país".
"No hay combustible, no hay dólares, la economía de la gente se va deteriorando todos los días y es necesario que el pueblo deje a un lado ese adormecimiento y salga a las calles", añadió Cuéllar.
Bolivia sufre desde principios de 2023 la falta de liquidez de dólares y la escasez de combustible, situación que este último mes se agudizó porque afectó a sectores productivos, agrícolas y de transporte.
Los productos de primera necesidad subieron de precio, lo que mantiene a la gente en incertidumbre debido a que el Gobierno se comprometió a bajar los precios y hasta la fecha no ocurre.
A todo eso se sumó un bloqueo de carreteras de 24 días de los seguidores del expresidente Evo Morales (2006-2019) en protesta por un proceso penal de Fiscalía por trata de personas y estupro que lo involucra, lo que paralizó a los sectores productivos, de transporte y afectó a la población en general.
Asimismo, un distanciamiento entre el exmandatario Morales y el presidente Arce ha provocado una ruptura en el oficialista Movimiento al Socialismo (MAS), situación que agudizó la crisis política y económica del país andino.