El gobernador de Tamaulipas, Américo Villarreal, calificó las amenazas de deportaciones masivas de migrantes hacia México, planteadas por el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, como "un aviso de tormenta".
Villarreal señaló que su estado, con una amplia frontera con la Unión Americana, se está preparando ante posibles escenarios inciertos en materia migratoria.
"Tenemos una frontera tranquila y ordenada, con programas del CBP y siete albergues funcionando, pero no sabemos exactamente qué podría suceder", declaró Villarreal durante un evento en Veracruz.
Por su parte, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, expresó optimismo en la capacidad de su gobierno para negociar con Estados Unidos en temas de migración y narcotráfico, buscando evitar medidas como los aranceles que Trump ha amenazado imponer.
Villarreal enfatizó la necesidad de estar atentos y preparados ante los posibles cambios en las políticas migratorias del vecino del norte, que podrían impactar significativamente a las comunidades fronterizas.
"Les hago el símil, estamos en un aviso de tormenta, no sabemos, quizás conforme se vayan acercando los días o los términos vamos a saber si esto es huracán o no y de qué grado, pero estamos preparándonos para poder darle solución a estos problemas", añadió.
El mandatario estatal dijo que por las ciudades fronterizas de Matamoros, Reynosa y Nuevo Laredo pasan diariamente unas 500 personas en promedio y "aproximadamente tenemos en nuestros albergues de 2,500 a 3,000 personas que están en espera de su cita" y recordó que los migrantes llegan con cuatro o cinco días de anticipación para garantizar su cita.
Previamente dijo que la frontera de Tamaulipas "es una de las más dinámicas de México; es el primer lugar de intercambio comercial vía terrestre (tractocamión) y el primer lugar de comercio a través de ferrocarril".
El viernes, Sheinbaum reiteró lo que había dicho el jueves, tras una charla telefónica con Trump y dijo estar "convencida" de que habrá un acuerdo.
Insistió en que, al igual que lo afirmó en una carta el martes, durante la charla que sostuvo el miércoles con Trump le explicó lo que México hace para atender el fenómeno migratorio y el combate al narcotráfico, particularmente en contra del fentanilo.
Tras la conversación, Trump aseguró en Truth Social que Sheinbaum "aceptó detener la migración a través de México y hacia Estados Unidos, efectivamente cerrando la frontera", mientras que ella publicó en la red social X que "reiteró que la postura de México no es cerrar fronteras".