La Organización Panamericana de la Salud (OPS) informó sobre un preocupante aumento de casos de dengue, Oropouche y gripe aviar (H5N1) en las Américas durante 2024.
Según el director de la OPS, Jarbas Barbosa, esta situación destaca la necesidad de reforzar estrategias para controlar los brotes y reducir su impacto.
El dengue ha alcanzado cifras históricas este año, con más de 12,6 millones de casos reportados, casi el triple que en 2023. Entre ellos, más de 21.000 han sido graves y se han registrado más de 7.700 muertes.
Los países más afectados son Argentina, Brasil, Colombia y México, que concentran el 90 % de los casos y el 88 % de las muertes. Brasil lidera en número de casos, evidenciando la magnitud de la epidemia en la región.
“El dengue está representando un riesgo mayor de lo normal para los niños. En países como Guatemala, el 70% de las muertes por dengue han ocurrido en niños”, afirmó el doctor Barbosa, durante una rueda de prensa, destacando que los menores de 15 años representan más de un tercio de los casos graves en países como Costa Rica, México y Paraguay.
El Director de la OPS explicó que la situación está relacionada con eventos climáticos que favorecen la proliferación de mosquitos, así como con la urbanización no planificada, la acumulación de agua por parte de las personas y el manejo deficiente de residuos, que crean criaderos para el vector.
A pesar de los retos, insistió en que “no estamos indefensos frente al dengue”, y mencionó la implementación de la Estrategia de Gestión Integrada para la Prevención y Control de Enfermedades Arbovirales de la Organización como un esfuerzo clave para “mantener relativamente bajos los casos graves y fatales mediante un mejor manejo de los pacientes”.
Las vacunas contra el dengue han sido introducidas en países como Brasil, Argentina y Perú, y Honduras planea hacerlo en 2025. Sin embargo, Barbosa señaló que “la vacuna actual no detendrá la propagación del virus a corto o mediano plazo y no proporciona alivio inmediato durante un brote”.
La OPS también ha observado un aumento en los casos de Oropouche, un virus transmitido por jejenes infectados y algunas especies de mosquitos. En 2024, más de 11.600 casos han sido reportados en 12 países y territorios de la región, principalmente en Brasil. “Aunque el brote de Oropouche está en una escala mucho menor que el de dengue, requiere nuestra atención debido a su creciente expansión geográfica” fuera de la Cuenca del Amazonas, incluidas áreas sin historial previo de esta enfermedad, comentó el doctor Barbosa.
La posibilidad de transmisión maternoinfantil, incluidos fallecimientos fetales y anomalías congénitas, está siendo investigada. “Los países deben fortalecer su vigilancia y continuar compartiendo información. Debemos trabajar de manera transfronteriza para monitorear nuevos casos y apoyar a los sistemas de salud para responder”, señaló el Director de la OPS.
En cuanto al virus H5N1, también conocido como gripe aviar, el doctor Barbosa informó que, aunque el número de casos en humanos es moderado, “el impacto en la salud pública sigue siendo limitado”, destacó. “En 2024, se han reportado 58 casos humanos en los Estados Unidos y uno en Canadá. Esto contrasta con los tres casos reportados en los dos años anteriores para toda la región”, afirmó.
El H5N1 es un virus comúnmente encontrado en aves, sin embargo, está infectando a otras especies también, como ganado lechero en los Estados Unidos. En total, 19 países de las Américas han reportado casos en animales de H5N1 este año y dos de esos países han confirmado casos humanos. El Director de la OPS destacó que la vigilancia es clave para rastrear el virus y comprender su evolución.
El doctor Barbosa llamó a seguir fortaleciendo la cooperación entre los sectores de salud humana, animal y ambiental para permitir la detección temprana e intervenciones oportunas en los animales.
El Director de la OPS concluyó la rueda de prensa subrayando la importancia de la colaboración entre países para enfrentar estos desafíos. “Cuando los países comparten información, coordinan y apoyan las respuestas a enfermedades, se salvan vidas”, subrayó.
El doctor Barbosa manifestó que la Organización continúa trabajando con los países de la región para fortalecer su capacidad de respuesta ante emergencias sanitarias y garantizar una acción coordinada frente a presentes y futuros brotes.