En una votación decisiva realizada este viernes, la Cámara de Representantes de los Estados Unidos dio luz verde al proyecto presupuestario presentado por el Partido Republicano. La propuesta obtuvo 366 votos a favor y 34 en contra, logrando la mayoría de dos tercios necesaria para avanzar, aunque todos los votos en contra provinieron de legisladores republicanos.
El representante demócrata Bennie Thompson, una figura prominente de su partido, expresó en redes sociales: "Hoy demostramos que la colaboración supera a la división. Los estadounidenses merecen un Gobierno que trabaje para ellos".
El proyecto ahora será debatido en el Senado, donde se anticipa un proceso más complejo debido a la mayoría demócrata. De no ser aprobado antes de la medianoche, el país enfrentaría nuevamente un cierre gubernamental (shutdown), dejando a aproximadamente 1.4 millones de empleados públicos sin salario, limitando las operaciones de varias agencias y cerrando parques y museos nacionales.
Este nuevo paquete de 118 páginas es significativamente más breve que la versión bipartidista original, que sumaba 1,547 páginas y fue rechazada esta semana por el presidente electo Donald Trump. Trump criticó la propuesta inicial por considerarla excesiva y demasiado concesiva hacia los demócratas.
El mandatario electo instó a los republicanos a resistir presiones demócratas: "Si amenazan con cerrar el Gobierno, ¡dejen claro lo que están haciendo!", escribió en sus redes sociales. Por su parte, Elon Musk, nominado por Trump para codirigir el futuro Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), calificó el proyecto como un ejemplo de despilfarro y urgió su rechazo.
La última versión del presupuesto contempla:
Sin embargo, la solicitud de Trump para suspender el techo de la deuda por dos años quedó fuera del acuerdo. El presidente electo y su equipo consideran fundamental abordar este tema ahora, antes de que asuma nuevamente la presidencia. "Es el momento ideal para debatir su eliminación", afirmó Trump en una entrevista, al tiempo que criticó la falta de cooperación demócrata en este aspecto.
Trump y su vicepresidente, JD Vance, enfatizaron la importancia de un acuerdo en el que se establezca un nuevo límite de deuda bajo la administración actual. "Si debe haber un cierre del Gobierno, que ocurra ahora, mientras Biden es presidente", señalaron en un comunicado conjunto.
El debate ahora se traslada al Senado, donde el desenlace determinará si el Gobierno de Estados Unidos enfrenta otro cierre o encuentra una solución temporal para su funcionamiento.