Residentes del residencial Cerro Alto, al norte de Santiago de los Caballeros, expresaron su preocupación por la tala de nueve árboles en un espacio público, presuntamente realizada sin autorización por los propietarios de una tienda china ubicada en las cercanías.
Los vecinos denunciaron que, además del impacto ambiental, el establecimiento utiliza la vía de acceso principal a la urbanización para su actividad comercial, generando caos vehicular en la zona.
Asimismo, señalaron que los empleados de la tienda convirtieron el parque del residencial en un área de comedor, lo que consideran una invasión inapropiada del espacio comunitario.
Carmen Martínez, una de las residentes, expresó: "Esperamos que nuestra posición prevalezca y las autoridades la tomen en cuenta".
Los residentes pidieron a las autoridades locales intervenir para resolver la situación y proteger el entorno ambiental y la tranquilidad del residencial. La dama advierte que no están dispuestos a dejar que la comunidad sea arrabalizada.
Los lugareños piden, además, que las autoridades de la Dirección General de Migración (DGM) investiguen por qué los empresarios trasladan a una cantidad significativa de empleados haitianos en un camión cerrado.
Indican que les gustaría saber cuál es el estatus migratorio de los ciudadanos del vecino país que laboren en el lugar en cuestión.
Manuel Tejada, representante legal de la tienda de capital chino, explicó que el desmonte fue realizado por una mala interpretación de los permisos otorgados por el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales para cortar varias plantas.
Detalló que la entidad gubernamental autorizó el corte de varias matas en el patio del establecimiento. Sin embargo, el personal a cargo cortó los árboles que estaban en la parte frontal.
El abogado dijo que sus clientes están en disposición de remediar el daño ocasionado.
"Nos estamos comprometiendo a sembrar nuevos árboles en los alrededores de la tienda", indicó Tejada.
Aseguró que la empresa está comprometida con las leyes medioambientales y con el desarrollo económico de la nación, aportando más de 90 empleos directos.
Trascendió que el negocio de capital chino fue sancionado con una multa económica por parte del Ministerio de Medio Ambiente y el Ayuntamiento de Santiago de los Caballeros por el desmonte de árboles.