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Diez senadores de Estados Unidos, encabezados por el representante de Nueva York de origen dominicano, Adriano Espaillat, solicitaron al presidente Joe Biden y al secretario de Estado, Antony Blinken que se tomen medidas urgentes para movilizar el apoyo internacional para el pueblo haitiano en su trabajo para reconstruirse después de años de desastres naturales, dificultades económicas y agitación política.
“Específicamente, le pedimos un esfuerzo de todo el gobierno para garantizar que Haití reciba la ayuda necesaria para lograr seguridad duradera, salud, asistencia sanitaria y movilidad económica a través de una estrategia y una financiación coordinadas”, dice el documento que, además de Espaillat, firma Yvette Clarke.
Los congresistas sugieren al gobierno de Estados Unidos trabajar con Canadá, la Unión Europea, Francia y otros miembros del grupo CORE para aumentar la ayuda financiera para revitalizar la Policía Nacional de Haití, mejorar el desarrollo comunitario y los programas de prevención de la violencia, además de la construcción de hospitales en la frontera con República Dominicana que atiendan especialmente a las embarazadas.
“Como saben, el asesinato del presidente del país, Jovenel Moïse, el 7 de julio, ha sumido en el caos a la nación caribeña de 11 millones de habitantes. Mucho antes de este trágico incidente, la situación de Haití era volátil ya que lidiaba con protestas políticas, violencia de pandillas, pobreza aplastante, aumento de casos de COVID-19 y ausencia de dosis de vacunas. Actualmente, la situación económica del país es grave y, recientemente, los disturbios civiles generalizados continúan aumentando en Haití debido a la escasez de combustible, alimentos, medicamentos e inseguridad que amenazan la vida”, agrega el documento del que también enviaron copia a la directora de la USAID, Samantha Power.