Al menos cuatro personas murieron este jueves y varias resultaron heridas en un ataque israelí contra la escuela Al Rimal, situada en el oeste de la ciudad de Gaza, informó la Defensa Civil de la Franja.
Aviones israelíes atacaron las instalaciones, ubicados en la calle Al Naser, informó el portavoz de la Defensa CIvil, que no ofreció más detalles sobre lo ocurrido.
Por su parte, la Media Luna Roja palestina aseguró que transportó el cadáver de una persona y a nueve heridos, como consecuencia del ataque y difundió un video del traslado en su cuenta de X.
En un breve comunicado, la Defensa civil denunció «la continua obstrucción por parte de la ocupación israelí del trabajo de los equipos médicos y de defensa civil en el norte de la Franja de Gaza» y subrayó que las tropas hebreas impiden a los equipos de rescate llegar a las casas bombardeadas.
El Ministerio de Sanidad palestino informó que 78 palestinos murieron en Gaza y otros 214 resultaron heridos desde el martes, tras dos jornadas de intensos ataques de artillería y bombardeos de las fuerzas israelíes a lo largo del enclave y, en especial, contra la zona norte que sufre 32 días de asedio.
«La ocupación israelí perpetró seis masacres contra familias en la Franja de Gaza, causando 78 mártires y 214 heridos durante las últimas 48 horas», detalló un comunicado del Ministerio, que aumentó a 43.469 el número total de fallecidos desde el inicio de la guerra y a 102.561 el de heridos.
El Ejército israelí anunció este jueves la incursión de nuevas tropas en Beit Lahia, según el texto, «tras recibir información de inteligencia previa y una evaluación de la situación» que indicaba la presencia de milicianos e infraestructura de Hamás en la zona. según un comunicado castrense.
Se estima que unos 3.000 gazatíes permanecen en la norteña ciudad de Beit Lahia, castigada en el último mes por intensos bombardeos y una acuzada falta de ayuda humanitaria y comida. En la nota, el Ejército asegura que están facilitando la «evacuación segura» de la población, si bien la mayoría de organizaciones humanitarias dicen que no queda ningún lugar seguro en la Franja.
El norte de Gaza afronta su peor ofensiva militar desde el inicio de la guerra. En la zona han muerto ya unos 1.800 gazatíes, según la Defensa Civil, desde que aviones, vehículos y tanques israelíes se reagruparan el pasado 5 de octubre con la intención, según fuentes castrenses, de evitar la reagrupación de los milicianos de Hamás.
La situación es también especialmente preocupante ante un sistema de salud colapsado, con los tres principales hospitales del norte asediados militarmente y la inacción desde hace 16 días de los equipos de rescate, incapaces de rescatar víctimas entre los escombros debido a los ataques.