El voleibolista neerlandés Steven van de Velde, a quien le fue permitido competir en los Juegos Olímpicos de París después de haber cumplido condena en prisión por la violación de una niña de 12 años, habló este lunes por primera vez ante la prensa sobre la ola de abucheos que recibió durante su participación en el torneo deportivo.
Nueve días después de haber sido eliminado en octavos de final junto a su compañero Matthew Immers, van de Velde afirmó que considera no volver a participar en unos Juegos Olímpicos y criticó a los medios de comunicación por darle tanta visibilidad a su caso, pues, aunque asegura que esperaba críticas, le sorprendió la magnitud de las mismas.
«Lo que la gente me haga no me importa. Cometí un error hace diez años. Tengo que aceptar eso. Sé que esto me afectará el resto de mi vida, pero hacerle daño a la gente que me rodea, ya sea Matthew, mi mujer, mi hijo… eso es ir demasiado lejos. Ese fue definitivamente un momento en el que pensé ¿merece la pena?», dijo el deportista, refiriéndose al nivel de reproches que recibió.
Van de Velde cumplió uno de los cuatro años a los que fue condenado por mantener relaciones sexuales en 2014 con la menor, a la que conoció por redes sociales, siendo consciente de su edad cuando él tenía 19 años. Al deportista le fue permitido competir en las Olimpiadas de París, pero no le fue autorizado alojarse en la Villa Olímpica con los demás deportistas ni hablar con la prensa.