Una aeronave de Air China chocó con una bandada de aves al aterrizar en el aeropuerto Xiamen Gaoqi, en la provincia de Fujian, China.
El incidente ocurrió en el momento crítico del aterrizaje, generando un fuerte impacto que fue claramente audible y perceptible para los pasajeros a bordo.
A pesar del choque, la aeronave logró aterrizar sin problemas. Inmediatamente después, el personal de la aerolínea realizó una inspección exhaustiva para evaluar cualquier daño potencial.
Afortunadamente, no se reportaron lesiones entre los pasajeros ni la tripulación, y la aeronave fue declarada apta para continuar sus operaciones.
Sin embargo, las aves salieron despedidas en todas las direcciones.