El presidente Xi Jinping rechazó las posiciones de EE.UU., así como la politización y estigmatización de la pandemia.
El presidente de China, Xi Jinping, ratificó este martes la contribución del gigante asiático a la investigación y el tratamiento sobre la Covid-19, en particular en la búsqueda de un candidato vacunal efectivo, el cual prometió para el mundo como un bien público.
También rechazó todo "intento de politización" o "estigmatización" en torno a la pandemia de la Covid-19, minutos después de que su homólogo estadounidense, Donald Trump, llamase a hacer que Beijing rinda cuentas por "infectar al mundo" con la Covid-19, durante la reunión de alto nivel del debate general de la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU).
El mandatario chino, al iniciar su discurso, recordó el 75 aniversario del fin de la Segunda Guerra Mundial (1939-1945) e hizo un paralelismo entre los esfuerzos que entonces permitieron la derrota del fascismo y los que ahora hace la humanidad para luchar contra la pandemia de la Covid-19.
En ese sentido, Xi expresó que "el virus será derrotado. La humanidad ganará esta batalla".
De esta manera, hizo un llamado a la cooperación internacional para enfrentar la pandemia, ante lo cual destacó que la respuesta a la enfermedad debe estar "guiada por la ciencia" y dar, en ello, un papel clave a la Organización Mundial de la Salud (OMS), muy criticada, poco antes, por Donald Trump.
Por otra parte, el líder chino aseguró que su país no va a mantener ningún tipo de guerra, "ni fría ni caliente", pese a las fuertes tensiones que vive con Estados Unidos.
El jefe de Estado destacó que China nunca buscará la "hegemonía" e insistió por un mundo basado en la cooperación y el multilateralismo.
Xi aseguró que Beijing se esforzará en resolver toda disputa a través del diálogo y la negociación. Consideró que, en un mundo tan interconectado como el de hoy, ningún país gana con los problemas del otro. "Hay que rechazar la mentalidad de suma cero", acotó.
Concluyó afirmando que "el relevo ya está en manos de nuestras generaciones. No podemos defraudar a nuestros pueblos ni a la historia".