El actor estadounidense Tony Todd, ampliamente reconocido por su emblemático papel en Candyman y por su participación en la saga Destino Final, falleció a los 69 años este viernes en su residencia de Los Ángeles, según confirmó su representante al medio Deadline.
Originario de Washington D.C., Todd murió tras una prolongada enfermedad, indicó su esposa Fátima Todd, quien compartió pocos detalles adicionales. El actor deja dos hijos, Alex y Ariana.
Todd estudió en el Instituto Nacional de Actores de Teatro Eugene O’Neill, en Connecticut, y debutó en cine en 1986 con Platoon, de Oliver Stone, compartiendo escena con figuras como Willem Dafoe, Johnny Depp y Forest Whitaker.
Filmes
Su potente voz y su 1,96 metros de altura también ayudaron para que poco a poco fuera asumiendo nuevos papeles en filmes como 'Colors' (1988) o 'Bird' (1988), hasta adentrarse ya en 1990 en su género por antonomasia: el terror.
Fue entonces cuando participó en 'Night of the Living Dead' (’La Noche de los Muertos Vivientes'), de Tom Savini, y dos años después hizo su gran papel en 'Candyman', de Bernard Rose, donde interpretó al espíritu del pintor Daniel Robitaille que reclamaba justicia en Chicago.
Su aclamada actuación le llevó a participar incluso en dos secuelas más de esta misma película.
Además, apareció en otros títulos de terror como 'The Crow' (1994), 'Wishmaster' (1997), 'Hatchet' (2006) o varias películas de la saga 'Destino Final' (año 2000, originalmente), donde encarnó al forense que atisbaba cuando la muerte se aproximaba.
Hasta sus últimos años continuó participando en cintas de terror, como 'Hell Fest' (2018) o 'Werewolf Game' y 'Stream', ambas previstas para estrenarse este año.
Por otra parte, Todd también se prodigó con frecuencia en televisión y tuvo varios papeles en la franquicia de 'Star Trek', apareció de forma recurrente en 'Homicide: Life on the Street' y puso su voz al servicio de 'Transformers: Revenge of the Fallen', así como recientemente interpretó a Venom en el popular videojuego 'Spider-Man 2′.