Francia.- Emmanuel Macron ha sido reelegido este domingo presidente de Francia por otros cinco años. Tras confirmase su victoria, prometió dar respuesta al descontento de los votantes de Marine Le Pen quien, pese a perder, logró el mejor resultado de la ultraderecha en una elección presidencial en Francia.
Según las primeras estimaciones, el candidato de La República en Marcha (LREM), de 44 años, obtuvo alrededor del 58% de los votos, una diferencia menor que en 2017 cuando derrotó a su rival de la Agrupación Nacional (RN) con un 66,1% de votos. "A partir de ahora, ya no soy el candidato de un campo, sino el presidente de todos", aseguró Macron durante el discurso de su victoria a los pies de la torre Eiffel en París.
Por su parte, Marine Le Pen destacó el éxito de sus resultados, a pesar de la derrota: "Los resultados de hoy ya representan una gran victoria”. Con alrededor del 42% de los votos, la candidata ultraderechista se queda muy por encima de la apabullante derrota que sufrió en 2017, cuando se tuvo que contentar con el 33,9%.
Recién reelegido presidente de Francia prometió esta noche "escuchar el silencio de los abstencionistas" y responder a las razones "del enfado" de quienes han apoyado a su rival, la ultraderechista Marine Le Pen, para tratar de restañar las heridas del país.
"El enfado que ha llevado a muchos de nuestros compatriotas a votar por la extrema derecha también debe encontrar una respuesta", subrayó Macron en un breve discurso en el Campo de Marte de París, frente a la Torre Eiffel, donde fue recibido por sus seguidores que le jalearon.
Aunque no avanzó qué tipo de respuesta, sí que reconoció que ese voto "obliga a considerar todas las dificultades" y afirmó que será su responsabilidad y la de los que le rodean durante los próximos cinco años.
El jefe del Estado también tuvo palabras para los que votaron por él "para oponerse a la extrema derecha". "Este voto me compromete para los próximos años, en particular para respetar las diferencias", aseguró.
Más allá de esos mensajes, Macron insistió en que el suyo es el triunfo de "un proyecto humanista, ambicioso para la independencia de nuestro país, para Europa (…), un proyecto social y ecológico basado en el trabajo y en la creación, un proyecto de liberación de las fuerzas académicas, culturales y empresariales".
Insistió en que "no se dejará a nadie en la estacada" y en que habrá que trabajar en favor de la unidad para "ser más felices en Francia y afrontar los desafíos futuros".
Avanzó que su nuevo mandato "no será de continuidad" sino que supondrá "la invención colectiva de un método renovado para cinco años mejores al servicio del país, de la juventud".
No se olvidó de referirse a la guerra de Ucrania, que "recuerda que atravesamos tiempos trágicos" y consideró que en ese conflicto "Francia tendrá que defender su voz".