El grupo palestino Hamás señaló este jueves que aunque las negociaciones en curso con Israel en Doha han avanzado de manera significativa y se vislumbra la posibilidad de un acuerdo cercano, persisten dos cuestiones sin resolver que obstaculizan el cierre definitivo del pacto.
El primer punto de fricción radica en la exigencia israelí de recibir una "lista completa de los prisioneros, tanto vivos como fallecidos". Hamás argumenta que cumplir con esta solicitud requiere, al menos, una semana de tregua, ya que los combatientes necesitan tiempo para localizar y verificar la situación actual de cada prisionero.
El segundo tema controvertido gira en torno a la propuesta israelí de incluir en la lista de prisioneros a soldados que cumplan criterios relacionados con la fase humanitaria, como aquellos que se encuentren heridos. Según Hamás, esta demanda contradice los términos previamente acordados para un intercambio de cautivos.
Aunque el diálogo parece prometedor, estas diferencias clave deberán resolverse antes de que las partes puedan concretar un entendimiento final.