Kamala Harris, vicepresidenta de Estados Unidos y candidata demócrata para las elecciones del 5 de noviembre, hizo un llamado crucial a la comunidad afroamericana en Filadelfia, pidiendo su apoyo en las urnas para definir el “destino para las generaciones venideras.”
En su mensaje, apeló a la fe cristiana como vínculo de unidad y motivación para la participación cívica.
Durante su recorrido por Filadelfia, Harris visitó la Iglesia de la Compasión Cristiana, una congregación predominantemente afroamericana, donde compartió reflexiones inspiradas en sus lecturas bíblicas.
En su discurso, insistió en la responsabilidad histórica de cada voto en la construcción de un futuro inclusivo y afirmó que la comunidad negra ha sido siempre una fuerza de cambio en EE.UU.
La candidata demócrata concluyó recordando los desafíos que la comunidad ha enfrentado y superado, invitándolos a ser protagonistas en esta elección y a asegurar un país que represente sus valores y aspiraciones.
“Mis primeros recuerdos de esas enseñanzas tienen que ver con amar a un Dios que nos pide que hablemos por aquellos que no pueden hablar”, dijo Harris ante la congregación.
Citó las vicisitudes del apóstol Pablo para difundir la palabra de Jesús e instó a los votantes a tomar en serio las elecciones del próximo 5 de noviembre. “Tenemos nueve días para decidir el futuro de nuestra nación”, insistió la vicepresidenta.
En su recorrido por Filadelfia, la ciudad más grande de Pennsylvania y un bastión demócrata, la vicepresidenta quemó sus últimos cartuchos para alentar los votos afroamericanos, que le podrían dar la victoria en este estado clave.
Tras su visita a la iglesia, Harris estuvo en la barbería Philly Cuts, donde escuchó las inquietudes de varios jóvenes afroamericanos sobre el rumbo que debe tomar el país.