Jason Thornburg, de 44 años, fue condenado a pena de muerte tras ser hallado culpable del asesinato de tres personas cuyos cuerpos desmembrados fueron encontrados en un contenedor de basura en llamas en Fort Worth, Texas.
Thornburg, quien fue declarado culpable por un jurado del condado de Tarrant, cometió los crímenes como parte de un sacrificio ritual.
La fiscal Amy Allin describió los actos como de una crueldad excepcional, calificando a Thornburg de "malvado".
El acusado confesó a la policía su implicación en la muerte de David Lueras, Lauren Phillips y Maricruz Mathis, así como la de su compañero de cuarto y pareja.
Esta macabra historia comenzó a finales de septiembre de 2021, cuando bomberos de Fort Worth respondieron al incendio en un contenedor de basura donde se descubrieron restos humanos desmembrados.
Las investigaciones revelaron que los cuerpos pertenecían a las tres personas mencionadas anteriormente: Lueras, Phillips y Mathis. Las víctimas murieron en días consecutivos en un motel en Euless, un suburbio de Fort Worth, donde Thornburg residía desde julio de ese año.
La policía señaló que los asesinatos ocurrieron en un lapso de cinco días: primero mató a Lueras cortándole la garganta, luego desmembró el cuerpo en la bañera del motel. Dos días después, asesinó a Phillips, degollándola en el mismo lugar.
Mathis, la tercera víctima, murió estrangulada tras un intento fallido de apuñalamiento.
Durante su detención e interrogatorio, Jason Thornburg confesó ser responsable de cinco asesinatos en total. Entre sus víctimas estaban las tres personas encontradas en el contenedor, así como su compañero de cuarto y una exnovia.
Explicó que sus actos estaban motivados por un supuesto mandato religioso, afirmando que tenía un amplio conocimiento sobre la Biblia y que creía que debía realizar “sacrificios”.
En cuanto a su compañero de cuarto de Thornburg, murió en un incendio sospechoso en su hogar el 21 de mayo de 2021. El ahora condenado a pena de muerte admitió que le cortó la garganta para después destapar una tubería de gas y encender una vela.
La declaración jurada citada en aquel año por AP reveló que imágenes de vigilancia cerca del contenedor que se incendiaba mostraron a un todoterreno cerca del lugar la noche del 21 de septiembre. Del vehículo descendió una persona arrojando algo dentro del depósito de basura. Después, el mismo sospechoso volvió a la mañana siguiente para repetir su tarea.
En septiembre de 2021, los abogados de Thornburg argumentaron que estaba loco al momento de cometer los asesinatos y que tenía una enfermedad mental grave, de acuerdo con reportes de Fox 4.
Russell Wilson, abogado que no estuvo asociado en ningún momento con el caso de Thornburg, durante una entrevista con el medio, destacó a finales de noviembre de este año que para que se le aplicará la pena de muerte al acusado era necesario que el jurado decidiera que Thornburg representa un peligro futuro.
“Si a usted le medicaran o lo mantuviera en un área para una persona que sufre problemas mentales, entonces se podría argumentar que esa persona no es un peligro futuro porque estaría confinada en prisión el resto de su vida”, concluyó el abogado.