Kanye West volvió al ruedo con una nueva controversia que, esta vez, también involucró a su hija mayor, la carismática North West.
A pesar de las constantes críticas pasadas en su contra, el rapero aprovechó la fiesta de lanzamiento de su nuevo álbum “Vultures” para insistir en demostrar nuevamente su afinidad por la ideología antisemita, luciendo una capucha negra similar a las del Ku Klux Klan. Lo severo del caso es que hizo partícipe de la actuación a su primogénita de 10 años.
El evento nocturno, que tuvo lugar este lunes en el Art Basel y se denominó “Vultures Rave”, mostró al artista primero con una prenda que cubría su rostro y más tarde con una capucha puntiaguda que evocaba la indumentaria del histórico grupo de odio Ku Klux Klan, mientras sonaba la canción que da título al controvertido álbum.
Sin duda, y como de costumbre, el cantante de 46 años no pasó inadvertido y su look fue más que ideal para la ocasión, pues tenía coherencia con la polémica letra de su nuevo sencillo. West abordó las acusaciones previas de comportamiento antisemita con versos como: “¿Cómo que soy antisemita? Acabo de follarme a una perra judía”. Esta combinación de vestimenta y letras escandalizó a numerosos usuarios en redes sociales, quienes tacharon a Ye de “asqueroso” y “enfermo”.
La reacción en X (antes Twitter) por parte de los usuarios fue inmediata y lapidaria. Algunos internautas, antes de maldecir al rapero y a su música, cuestionaron la pasividad generalizada ante tal gesto durante la presentación, pues “los negros se quedan de brazos cruzados”. Mientras que otros fueron más allá, acusando directamente a West de antisemitismo y misoginia: ”Kanye West es un antisemita. Odia a los judíos y los quiere muertos. Abusa de las mujeres. Es un ser humano repugnante”. También hubo quien recordó que no es la primera vez que Kanye hace alusiones al KKK.
Por increíble que parezca, un sector de sus seguidores intentó interpretar el acto como un mensaje contra la supremacía blanca, pero esto fue rápidamente desestimado por otros críticos. “Está en su fiesta de escucha llena de violadores y maltratadores después de todo un año de antisemitismo y sus fans quieren hacerme creer que el hecho de que lleve una capucha puntiaguda es para transmitir un mensaje positivo”, arremetió un usuario indignado.
La situación se tornó aún más controvertida al observarse que North West, la hija de 10 años que Kanye comparte con su ex esposa Kim Kardashian, estaba en el escenario en ese momento. De hecho, se encontraba al lado de su antisemita padre, como parte de la actuación. En redes sociales, muchos comentarios resaltaron lo incómodo de la situación para la menor: “Sácala del escenario, hermano”.