GINEBRA.– La nigeriana Ngozi Okonjo-Iweala fue elegida este lunes como directora general de la Organización Mundial del Comercio (OMC), por lo que se convierte en la primera mujer al frente de este organismo, confirmó este en un comunicado.
Okonjo-Iweala, nacida en 1954, es además el primer dirigente africano en dirigir la organización, liderada en los pasados siete años por el brasileño Roberto Azevedo.
Ocho candidatos se presentaron a mediados del pasado año como aspirantes a suceder a Azevedo, de los que dos mujeres pasaron el corte final: la propia Okonjo-Iweala y la surcoreana Yoo Myung-hee, quien sin embargo se retiró de la liza a principios de este mes, ante la falta de apoyos.
La aspirante nigeriana ya había sido propuesta en octubre de 2020 como directora general del organismo, pero en aquel entonces la delegación estadounidense se mostró en contra y partidaria de la candidata surcoreana, por lo que se decidió posponer el proceso de elección.
Okonjo-Iweala fue la primera mujer ministra de Finanzas de su país (puesto que ocupó dos veces, de 2003 a 2006 y de 2011 a 2015), también la primera en ocupar la cartera de Asuntos Exteriores, aunque sólo durante tres meses, en 2006.
A nivel internacional ha tenido cargos de responsabilidad en distintas entidades, entre ellos el de directora gerente del Banco Mundial y el de presidenta de la Alianza para las Vacunas GAVI, cargo que ejerce en la actualidad y a título independiente.
Su antecesor en la OMC, Roberto Azevedo, dejó su cargo un año antes de que finalizara su mandato para convertirse en directivo de la multinacional PepsiCo.
Okonjo-Iweala asume el liderazgo de una organización que ha atravesado años de crisis debido a la estrategia de Estados Unidos, durante la Administración del presidente de Donald Trump, de paralizar el nombramiento de jueces de su Órgano de Apelación, la principal instancia de resolución de disputas de la OMC.
Además, la agencia, que en 2020 cumplió un cuarto de siglo como sucesora del Acuerdo General de Aranceles Aduaneros y Comercio (GATT), lleva más de una década sin lograr avances en la negociación de nuevos mecanismos internacionales de regulación del comercio, por la paralización de la Ronda de Doha, iniciada en 2001.