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Brian May actúa en directo con Queen + Adam Lambert durante su última gira en 2019. / Andrew Chin/Getty Images
Es uno de los guitarristas mejor valorados de la historia de la música, y en estos meses de confinamiento ha seguido en activo regalándonos grandes momentos. Brian May, el guitarrista de Queen, no ha dejado de aparecer en sus redes sociales enseñándonos a tocar y contándonos curiosidades. También nos dio un pequeño susto con un accidente doméstico, pero ha llegado a cumplir los 73 años como uno de los músicos más entregados y divertidos del momento.
Después de toda una vida dedicándose a tocar la guitarra, con una técnica que le ha llevado a ser el mejor considerado por los fans y la crítica, Brian May tiene un estilo muy propio y reconocido. Tiene sus propias maneras de tocar y de interpretar la música, y nos ha regalado algunos de los solos más importantes de la música.
Entre estas manías, cabe destacar que May no toca su guitarra Red Special con una púa, sino que lo hace con una moneda de seis peniques, algo realmente curioso. Esta circunstancia explicaría que el peculiar sonido de Brian lo consigue porque esta moneda no tiene los bordes lisos, sino dentados. Hay que tener en cuenta además que Brian toca las cuerdas muy suavemente y de manera inclinada, para tener cuidado de no romperlas. De esta manera, la moneda no se le queda atascada en las cuerdas como podría pasar con la púa.
En una entrevista con Premier Guitar, el miembro de Queen descubrió el secreto y explicó por qué prefiere utilizar una moneda en lugar de una púa común y corriente: “Tuve que pasar por un largo camino, solía usar púas muy flexibles porque pensaba que de esa forma obtendría un sonido más fluido y sería mejor en lo que hacía. Porque no afectará la forma en que mueves los dedos hacia adelante y hacia atrás”, contaba en la conversación.
El artista además explicó cómo se dio cuenta de que este objeto, uno de los más comunes de nuestro día a día, era ideal para conseguir un mejor sonido: “Con el tiempo descubrí que me gustaban las púas más difíciles porque sentía más acción en mis dedos y por tanto, un día supongo lo intente porque pensaba en eso, de esta forma puedo sentir todo lo que pasa en las cuerdas de la guitarra y en mis dedos. Dije: ‘esto me dará muy poca flexibilidad, pero de hecho obtengo toda la flexibilidad que necesito desde aquí, esos puntos al costado de la moneda”.