El ministro de Agricultura de la República Dominicana, Limber Cruz, expresó este jueves su preocupación por el impacto que están teniendo las deportaciones de haitianos en el sector agrícola del país.
Cruz señaló que la mano de obra en áreas claves como el banano, café y ganadería se están viendo afectada, ya que los trabajadores haitianos constituyen una parte significativa de la fuerza laboral en estos sectores.
Agregó que la escasez de trabajadores podría generar un descenso en la productividad agrícola, lo que eventualmente afectaría el suministro y precios de productos esenciales en el mercado local.
Cruz, también consideró que será necesario invertir en sistemas de riego, drones, tractores y otros equipos costosos, destacando que este proceso requerirá una participación importante del gobierno y del Banco Agrícola para facilitar el financiamiento a los productores. Asimismo, instó a los agricultores a seguir incentivando el empleo de mano de obra local para enfrentar la situación.
Mientras que el presidente ejecutivo de la Junta Agroempresarial Dominicana (JAD), Osmar Benítez, aseguró que República Dominicana está en una situación difícil, ya que los dominicanos no están interesados en trabajar en el sector agrícola.
Informó que están haciendo un levantamiento para determinar la cantidad de trabajadores que necesitan, pero que mientras tanto han optado por utilizar la tecnología.