La violencia de género representa un alto riesgo subyacente para las mujeres afectadas por la crisis venezolana que viven dentro y fuera de su país, advirtió este viernes la ONG Comité Internacional de Rescate (IRC, por sus siglas en inglés), tras analizar datos recopilados entre 2020 y 2022 en el país caribeño, Colombia y Perú.
"En un mundo donde las mujeres estamos expuestas a diferentes tipos de violencia solo por ser quienes somos, aquellas que viven en medio de una crisis humanitaria corren aún más peligro", indicó la directora para la Respuesta a la Crisis de Venezuela en el IRC, Marianne Menjivar, según recoge un comunicado de la organización publicado en el Día Internacional contra la violencia contra la mujer.
Y agregó: "Ese es el caso de las mujeres venezolanas, no solo en su país de origen sino también en las comunidades donde se encuentran en tránsito".
Menjivar añadió que las migrantes venezolanas se enfrentan a la marginación, el acceso desigual a la asistencia y la discriminación.
El IRC identificó en su último informe que la violencia psicológica es el tipo más común reportado por las mujeres venezolanas que participaron en sus programas de actuación en Colombia (40 %), Perú (38 %) y en la propia Venezuela (64 %).
Y las parejas actuales o anteriores fueron los perpetradores en la mayoría de los casos en los tres países.
La organización destacó que, para combatir la violencia a la que se enfrentan las venezolanas, tanto dentro como fuera de su país, los programas de ayuda deben asegurarse de que "los mecanismos de protección e integración existentes se fortalezcan para crear las condiciones para que las mujeres y las niñas reconstruyan sus vidas libres de violencia".
En Venezuela, además del hambre y el declive económico, el Comité Internacional de Rescate destaca el riesgo diario a la violencia al que se enfrentan las mujeres: durante los primeros nueve meses del año hubo un feminicidio cada 37 horas, según sus cifras.
Independientemente del tipo de violencia experimentada, cuatro de cada cinco mujeres expresaron que no querían denunciar el caso a las autoridades, aunque el 74 % mencionó que los incidentes eran recurrentes.
Fuera del país, en estudios del IRC realizados con migrantes venezolanas en Colombia y Perú el organismo subraya que la violencia contra las mujeres es una preocupación que afecta la mitad de estas.
Un problema que ha denunciado previamente Amnistía Internacional (AI), organización que afirma que en estos dos países, los principales destinos de refugiados y migrantes venezolanos del mundo, están fallando en garantizar y proteger el derecho a una vida libre de violencia y discriminación para las mujeres del país caribeño.
"En Perú y Colombia sí existen sistemas y normativas que protejan a las mujeres sobrevivientes de violencia basada en género, pero en el caso particular de las mujeres venezolanas no se aplica (…) y al final del día sus derechos están siendo violados", afirmó a EFE la encargada de campañas de AI para Suramérica, Clara del Campo, en una entrevista anterior.
La investigación de Amnistía Internacional menciona que, según datos oficiales, la violencia de género contra mujeres venezolanas escaló un 71 % entre 2018 y 2020 en Colombia y un 31 % entre 2019 y 2020 en Perú.
Fuente: EFE