x
El presidente de Colombia, Gustavo Petro, marcó distancia respecto a la postura de sus predecesores ante la crisis en Venezuela, luego de que se confirmara y posteriormente se desmintiera el secuestro de la dirigente opositora María Corina Machado.
La detención de Machado fue inicialmente reportada por su equipo político, periodistas y defensores de derechos humanos, generando una ola de condenas internacionales. Sin embargo, informaciones posteriores desde Caracas señalaron que la líder opositora habría sido liberada, aunque las circunstancias aún no son claras, lo que ha alimentado la confusión.
En este contexto, Petro reaccionó a las críticas de los expresidentes Álvaro Uribe, Juan Manuel Santos e Iván Duque, quienes condenaron enérgicamente el arresto. A través de un mensaje en la red social X, el mandatario colombiano se refirió al caso como un ejemplo del "mundo de las fake news", destacando la necesidad de prudencia ante la proliferación de información no verificada.
Confusión sobre el paradero de Machado
La incertidumbre persiste en Venezuela, donde las versiones sobre la detención y posible liberación de Machado son contradictorias. Algunos medios sostienen que ya fue liberada, mientras que otros indican que sigue bajo custodia.
Petro y su enfoque en política exterior
Gustavo Petro ha mantenido una postura cautelosa respecto a Venezuela, diferenciándose de la línea más confrontativa adoptada por sus predecesores. Aunque ha criticado el gobierno de Nicolás Maduro, su enfoque ha sido evitar declaraciones precipitadas y priorizar la verificación de los hechos antes de emitir juicios.
Por otro lado, los expresidentes Uribe, Santos y Duque reiteraron sus fuertes críticas al régimen de Maduro, señalando la detención como un atentado contra los derechos humanos y la democracia en Venezuela. La discrepancia en las respuestas refleja las diversas estrategias políticas y diplomáticas empleadas por los líderes colombianos frente a la situación venezolana.