El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, se sometió este martes a nuevos estudios médicos de seguimiento luego de sufrir el pasado fin de semana un accidente en su residencia.
Lula está «apto para continuar con su rutina de trabajo» y deberá someterse a una nueva revisión en 72 horas, según un comunicado del Hospital Sirio Libanés de Brasilia.
El presidente brasileño duró cerca de una hora en el hospital donde se hizo otro examen de imagen, cuyo resultado, según los médicos, permaneció «estable» frente al anterior.
Lula sufrió una caída el sábado, que le causó un pequeño corte en la nuca que requirió de cinco puntos de sutura.
El accidente no impidió que el mandatario continuara trabajando con normalidad, pero sí restringió algunas de sus actividades, como viajes de corta y larga duración, lo que le impidió asistir a la cumbre de los BRICS, en Rusia.
Por recomendación médica, Lula puede trabajar desde el Palacio de la Alvorada, su residencia, pero el regreso al Palacio presidencial de Planalto y la realización de viajes de corta duración dependerán de nuevas evaluaciones médicas.